Oscuridad, basura, mal olor, escándalo y consumo de droga hay a diario en las canchas que hay al inicio de cerro Paraíso y que colindan con la ciudadela El Paraíso, según denuncias repetidas de sus moradores.

Los terrenos de las canchas están en lo alto, en la parte final de la ciudadela, desde hace cuatro años están bajo jurisdicción municipal, pero no se ha realizado ningún trabajo para adecentar el área, que, además, cuenta con un bosque nativo y da vista al centro y norte de la ciudad.

Debido a las gestiones de los moradores, mediante oficios a la Alcaldía, hoy, a las 10:00, habrá una reunión con el alcalde Jaime Nebot para tratar este y otros temas que afectan a la ciudadela, indicó Hugo Víquez, morador de El Paraíso, que trabaja activamente por las mejoras en ese sector.

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Víquez dice que los terrenos de las canchas y la pérgola que ahí construyó la administración de Assad Bucaram hace más de 30 años están en total abandono, que el área es visitada a diario por parejas que van a tener relaciones sexuales, jovenes que van a consumir droga, delincuentes, vagabundos.

En un recorrido realizado por Viva Guayaquil se pudo observar que tanto en el ingreso en la calle Los Naranjos, tanto por las escalinatas de la gruta como la que da directo a las canchas, los escalones están destruidos, los tachos de basura con las bases rotas, las bancas oxidadas y rodeadas de tierra y basura; la pérgola ha perdido parte del hormigón y por ello se ven los fierros, el baño tiene toda la madera destruida y la letrina no se puede usar. El área tampoco cuenta con iluminación porque las pocas lámparas que hay no funcionan, por eso una de las moradoras, cuya vivienda está cercana a las escalinatas, dijo que ella tuvo que hacer poner dos reflectores, para que haya un poco de claridad.

“Eso de arriba es muy oscuro, y como venían muchachos de otras partes a fumar marihuana, por eso nosotros hace más o menos un mes pusimos los reflectores”, dice la moradora, quien también se lamenta del escándalo que hacen en las noches gente que llega a beber al lugar.

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Añade que por temor a la presencia de extraños ella ha tenido que poner una cámara de seguridad a la entrada de su casa. (I)

Esos terrenos son desde hace años del Municipio, pero no se ha realizado ningún trabajo para mejorar el área. Ese sector es oscuro y llegan personas que le dan mala imagen.Hugo Víquez, morador de El Paraíso