La agencia belga encargada de analizar la amenaza terrorista está preocupada por los medios “ilimitados” disponibles para algunos países del Golfo, entre ellos Arabia Saudita, para difundir un Islam radical “medieval”, hostil hacia los judíos y los homosexuales, según un informe que se debatirá en el Parlamento belga.

Este informe del Ocam (Órgano de coordinación para el análisis de la amenaza), del cual se obtuvo una copia ayer, se basa en los manuales utilizados por los cursos en árabe que se dan a los estudiantes de la escuela islámica de la Gran Mezquita de Bruselas, una institución que está en la mira del Gobierno.

En este espacio financiado por Arabia Saudita a través de la Liga Islámica Mundial, el Ocam señala el “contenido conflictivo en el plano del radicalismo, de la xenofobia y del antisemitismo” de ese material pedagógico que sirve para formar a los futuros imanes.

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Además de las escrituras que describen a los judíos como “personas corruptas, malvadas y traidoras”, otros también describen “la guerra” que se supone que cada musulmán sunita debe llevar a cabo contra quienes no lo son. Los textos proponen además formas para matar homosexuales, como “apedrear”, “disparar” o lanzarlos “desde el tejado del edificio más alto del pueblo”. El informe será debatido el miércoles a puerta cerrada por la comisión parlamentaria que ha seguido la investigación de atentados yihadistas de Bruselas que dejaron 32 muertos el 22 de marzo de 2016. En el debate estará el máximo responsable de Ocam, Paul van Tigchelt, dijeron dos diputados. A finales del 2017, en sus conclusiones, la comisión de investigación criticó el islam “salafo-wahabita” de la Gran Mezquita. (I)