La parte frontal del vehículo iba inclinada hacia adelante, el compacto estaba descuadrado, la llanta trasera del lado derecho se sacudía al punto que daba la impresión de que se saldría, la puerta del conductor tenía una parte cubierta con masilla, la del copiloto no tenía la manigueta para abrir.

Así, la mañana del viernes 26, una camioneta Datsun 1200 del año 74 circulaba por las calles Esmeraldas y Colón y desde allí avanzó hasta la 13 y Sucre. En ese breve trayecto el chofer no se encontró con ningún agente civil de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) que le pida documentación del carro, cuya pintura estaba desgastada.

Pese a los operativos de la ATM, en varios sectores de la ciudad ese cuadro se replica. Carros en mal estado circulan y en algunos casos prestan servicio informal de transporte.

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Por ejemplo, en la av. Quito y Clemente Ballén, en los alrededores de almacenes de venta de cerámica, la tarde del viernes un chofer ofrecía fletes en una camioneta que no tenía la tapa del combustible y los neumáticos estaban lisos. La lata de las puertas y del guardafango derecho estaba corroída.

Lo mismo ocurrió en las inmediaciones del mercado municipal de la calle Pedro Pablo Gómez, donde a más de camionetas, automóviles hacen las veces de taxis informales.

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El control a estos vehículos tomó vigencia luego de que durante las dos últimas semanas Guayaquil y su área de influencia soportaron graves problemas de tránsito. Aquello fue provocado por accidentes en los que, según conductores consultados, estuvieron involucrados vehículos con evidente estado de vetustez que circulan por la urbe porteña.

Los tres principales accesos al Puerto Principal: las avenidas Samborondón, León Febres-Cordero (La Aurora-Daule) y la vía a la costa sufrieron congestionamiento en horas pico, situación que perjudicó a conductores que se retrasaron entre dos o tres horas para llegar a sus destinos.

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El jueves 18, en la av. Samborondón dos tráileres se quedaron averiados en el complejo vial de la Unidad Nacional, en el puente con dirección Samborondón-Guayaquil, lo que caotizó el tráfico en la zona.

El miércoles 24, el desperfecto mecánico de un carro en el paso elevado de la avenida Plaza Dañín afectó el tránsito en la Pedro Menéndez Gilbert y los embotellamientos llegaron hasta la av. Samborondón.

William Ayala, jefe de operaciones de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), comentó que ese percance reveló la necesidad de que se ubiquen grúas en sitios estratégicos.

No obstante, con la entrega del nuevo puente (prevista para abril) sobre el río Daule que enlazará Guayaquil con Samborondón, los cabildos de ambas ciudades apuntan a descongestionar el flujo vehicular.

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El mismo 24, en la av. León Febres-Cordero, el volcamiento de un tráiler complicó el flujo vehicular en La Aurora. Testigos del hecho comentaron que el vehículo pesado circulaba con las llantas lisas.

El tanto, el embotellamiento que se registró el jueves 18 en la vía a la costa habría sido provocado por un operativo policial cercano al puente de la calle Portete. No obstante, durante el trancón algunos carros se chocaron y otros se averiaron en varios tramos de la vía Perimetral, una arteria principal que enlaza el norte y sur de Guayaquil. (I)

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Carros ha retenido la ATM en lo que va de enero por circular sin una revisión técnica vehicular.

En Guayaquil es válida la revisión técnica (...), pero no estamos exigiendo que la revisión técnica sea de Guayaquil. Lo que decimos es que sea cualquier revisión técnica”.Andrés Roche, Gerente de la ATM