Que el sistema de recolección de basura no abarca eficientemente a sitios populosos del norte, sur y suroeste de la ciudad es uno de los cuestionamientos del Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos al trabajo realizado por el consorcio Puerto Limpio durante sus siete años de contrato.

Cumplido el ciclo contractual, el Municipio de Guayaquil prevé adjudicar el nuevo contrato para la recolección de desechos en marzo próximo, una vez que el proceso de licitación ya se publicó en la página web del Servicio Nacional de Contratación Pública.

César Cárdenas, director del Observatorio Ciudadano, sostuvo que es necesario que el nuevo contrato sea de carácter domiciliario, es decir, que los carros recolectores circulen por todas las calles, no solo por las principales como ocurre actualmente, según él.

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“Los recorridos siguen siendo perimetrales. Solamente en el centro de la ciudad y en las ciudadelas cercanas al centro, el recorrido es todos los días. Mientras, en los sectores populares, donde viven cerca de dos millones de personas, el recorrido es perimetral”, recalcó.

Según Cárdenas, instaurando un sistema domiciliario se evitaría la acumulación, en las calles principales, de desechos que son arrojados por quienes no alcanzaron a botar los desperdicios en el momento en que pasó el carro recolector.

En respuesta a ello, Karla Aguas, vocera del consorcio Puerto Limpio, que también participará en el nuevo proceso de licitación, señaló que el servicio de la empresa es “de puerta a puerta”. Pero que a pesar de eso, en varios sectores de la ciudad se evidencia una mala disposición de los desechos por parte de los ciudadanos.

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Puerto Limpio identificó al menos 13 sectores del norte, sur y suroeste de la urbe, donde hay mala disposición y difícil acceso, entre ellos, las cooperativas Nueva Prosperina, Janeth Toral, Sergio Toral, las ciudadelas Sauces, Alborada, Floresta 1 y 2, Mucho Lote y la calle Q.

Cuando llegan temas ciudadanos, algunas quejas se las atiende, pero créame que son muy pocas (por servicio de recolección). La recolección de basura en Guayaquil está ordenada”.Carlos Luis Morales, Concejal

Otra de las críticas del Observatorio Ciudadano al servicio de recolección de basura apunta a la política de reciclaje. César Cárdenas consideró que no hay tal, pues más allá de las campañas educativas que se difunden en los medios de comunicación, al momento de depositar los desechos en el relleno sanitario Las Iguanas todo se mezcla, aseguró él.

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Sostuvo que el nuevo contratista del servicio debería exigir dos tipos de transporte; el de los desechos comunes y otro para los restos reutilizables que podrían ser reciclados por el mismo contratista.

Manuel Samaniego, concejal de la ciudad por el Partido Social Cristiano, consideró que el servicio de Puerto Limpio “ha sido muy bueno” y que las exigencias del contrato se han cumplido. Y dijo que aquello es percibido así por la gente.

Al ser recorridos perimetrales, pasar por avenidas solamente principales, la gente que no puede sacar su basura a tiempo la saca después que el carro pasó y ese es un problema”.César Cárdenas, Observatorio Ciudadano

Anticipó que para el nuevo contrato, que tomará en cuenta el crecimiento poblacional de la urbe, se exigirá a la empresa ganadora que implemente nuevos equipos para su labor.

“Las bases del concurso son realizadas de acuerdo a la realidad de la ciudad actual y a lo que funciona en Guayaquil”, afirmó Samaniego.

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Carlos Luis Morales, concejal independiente, también evaluó positivamente el trabajo de Puerto Limpio. Sostuvo que la acumulación de basura en la vía pública es un problema de irrespeto a los horarios. (I)

El servicio
Según la Superintendencia de Compañías, los ingresos del Consorcio Puerto Limpio por sus servicios en la urbe, en 2016, fueron de $ 50,87 millones. Mientras, durante el 2015 los ingresos fueron de $ 47,38 millones. Los rubros de esta firma aumentan anualmente.