William Shatner, astro de Star Trek y uno de los personajes más reconocibles de la ciencia ficción, se convirtió el miércoles en un viajero espacial de la vida real en la segunda misión tripulada de Blue Origin, que consideró una de las experiencias más profundas de su vida.

Fue increíble”, dijo el actor canadiense de 90 años, que se emocionó hasta las lágrimas tras pasar 11 minutos en el espacio.

El cohete New Shepard despegó a las 09:49 (14:49 GMT) tras una demora de dos días, elevándose a 106 kilómetros por encima del nivel del mar.

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En esta imagen fija tomada de un video de Blue Origin, Audrey Powers, miembros de la tripulación de la misión New Shepard NS-18 (L-R), Vicepresidente de Operaciones de Misión y Vuelo de Blue Origin; el actor de "Star Trek", William Shatner y el cofundador de Medidata Solutions, Glen de Vries, viajan a la plataforma de lanzamiento el 13 de octubre de 2021, antes de despegar. AFP Foto: -- JOSE ROMERO

Shatner, el capitán Kirk de la icónica serie Star Trek, viajó con el ejecutivo de Blue Origin, Audrey Powers, el confundador de Planet Labs, el australiano Chris Boshuizen, y Glen de Vries de la plataforma de investigación sanitaria Medidata Solutions.

El fundador de Blue Origin, Jeff Bezos, saludó a los tripulantes cuando salían de la cápsula y recibían una lluvia de aplausos y champán.

Como los casi 600 astronautas que viajaron antes que él, Shatner se maravilló de la experiencia de sentir la ingravidez y la impresionante vista de la Tierra desde el espacio. “Me has dado la experiencia más profunda que pueda imaginar. Estoy muy emocionado por lo que acaba de pasar”, le dijo a Bezos, conmovido hasta las lágrimas.

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Jeff Bezos (derecha) saluda al actor canadiense William Shatner (izquierda) cuando sale de la cápsula después de aterrizar después de la misión NS-18 de New Shepard al espacio cerca de Van Horn, Texas, EE. UU., 13 de octubre de 2021. Foto: EFE

“Lo que ves abajo es la madre Tierra y necesita ser protegida”, dijo más tarde a periodistas.

La misión replicó el vuelo inaugural de Blue Origin en julio, que incluyó al propio Bezos y fue visto como un momento decisivo para el incipiente sector del turismo espacial. Esta vez la atención se centró en Shatner, quien se convirtió en la persona de mayor edad en viajar al espacio.

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Los viajes intergalácticos del Enterprise, la nave de Star Trek comandada por el personaje interpretado por Shatner, estimularon a los estadounidenses a prestar atención a las estrellas mientras la Nasa desarrollaba su programa espacial en la década del 1960.

“El Capitán Kirk (...) representa, quizás más que nadie, ‘la última frontera’ para varias generaciones, en Estados Unidos y en todo el mundo”, dijo a la AFP el guionista e historiador de la serie, Marc Cushman.

Batalla por el turismo espacial

Para Blue Origin, mientras tanto, la segunda misión en menos de tres meses fue un paso más en su intento de consolidarse como líder en turismo espacial.

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Boshuizen y Vries aumentaron a tres el número de personas que pagaron por viajar, después del adolescente holandés Oliver Daemen, que estuvo del primer vuelo.

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La competencia en el turismo espacial está creciendo.

Virgin Galactic, que ofrece una experiencia similar de unos minutos de ingravidez y la vista de la Tierra desde el cosmos, lanzó una nave con su fundador Richard Branson en julio, unos días antes que Bezos.

Y, en septiembre, SpaceX envió a cuatro personas en un viaje de tres días alrededor del planeta, un esfuerzo mucho más ambicioso, pero también probablemente mucho más oneroso.

La misión llevó a Shatner junto con Audrey Powers, el vicepresidente de operaciones de misión y vuelo de Blue Origin y los clientes Chris Boshuizen y Glen de Vries. Foto: EFE

Para muchos entusiastas del espacio, el viaje de Shatner fue la cereza del postre para un fenómeno de la cultura pop que inspiró a generaciones de astronautas, científicos e ingenieros.

Star Trek tuvo una larga vinculación con la NASA, cuyos científicos recibieron los primeros guiones para verificar su precisión, según Cushman, el escritor.

“Esos científicos, así como casi todos en las agencias espaciales, eran ávidos observadores de Star Trek y entendieron bien que la popularidad de la serie ayudó a despertar un creciente interés y financiamiento para el programa espacial”, dijo.

Uno de sus megafanáticos es el propio Jeff Bezos, fundador de Amazon. Incluso publicó en Instagram una obra de arte que hizo a los nueve años y que incluía un instrumento de comunicación que influyó en el diseño de un teléfono plegable décadas después.

Bezos ha dicho que Alexa, el asistente de voz de Amazon, está inspirado en la computadora conversacional del Enterprise. Además, hizo una fugaz aparición en la película Star Trek Beyond de 2016. (I)