Pionero en darle identidad a los sonidos tradicionales de Colombia, a través de sus 14 álbumes de estudio, 3 álbumes en vivo y 7 álbumes recopilatorios, Carlos Vives ha recorrido el mundo entero con su propuesta musical.

Intérprete de éxitos mundiales como La gota fría, Fruta fresca, Volví a nacer, Déjame entrar y La bicicleta regresa a Ecuador con su espectáculo Después de Todo Vives, show con el retomó los conciertos presenciales a finales del 2021, un viaje musical que desborda alegría, que va desde sus grandes clásicos, hasta sus más recientes lanzamientos.

Top Shows es la empresa organizadora del concierto en el país para sus dos funciones en Quito y Guayaquil. En la capital, tiene previsto presentarse el jueves 1 de septiembre, en el Estadio Olímpico Atahualpa; y el sábado 3 de septiembre en el estadio Alberto Spencer.

Publicidad

La preventa estará disponible en exclusiva con tarjetas Produbanco con el 10% de descuento, a partir de las 00:00 del lunes 28 de marzo, en www.ticketshow.com.ec. Y para todas las formas de pago desde el lunes 4 de abril.

Los costos de entradas para la capital son $ 180 (Premium Box Produbanco), $ 140 (Top Box), $ 100 (Golden Box ), $ 80 (Palco), $ 60 (Tribuna) y $ 40 (general).

Mientras que los valores para los boletos de Guayaquil $ 210 (Premium Box Produbanco), $180 (Top Box), $ 140 (Golden box), $ 80 (vip), $45 (tribuna) y $ 35 (general).

Publicidad

Recientemente, Vives presentó su primera colaboración con su compatriota Camilo en el tema titulado Baloncito viejo. La canción estuvo bajo la producción de Vives, Andrés Leal y Martín Velilla, y fue compuesto además por Vives y Camilo, junto al nominado al Latin GRAMMY, Jorge Luis Chacín, Andrés Leal y Martín Velilla.

En la canción y el video musical, Vives y Camilo expresan la metáfora del amor a través del fútbol en donde utilizan el ‘baloncito viejo’ como símbolo del amor y la importancia de jugarlo de forma responsable para no lastimar al otro. 

Publicidad

Bajo la dirección de Felipe Montoya/Sergio Ramírez para Mestiza Films y la dirección creativa de Carlos Vives, el video musical se grabó en Miami, FL. Viajando en el tiempo en una historia desarrollada en un club deportivo del siglo XIX, el video se inspira en la estética, el vestuario y la escenografía de producciones tales como The English Game. (E)