Madrid, 22 abr (EFE).- “Sencilla, risueña, sincera y muy simpática” son algunos de los adjetivos que utiliza el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa para retratar a Tamara Falcó, hija de Isabel Preysler, mujer con quien el escritor comparte ahora su vida.

En el retrato que hace de ella para la revista Harper’s Bazaar, Vargas Llosa asegura: “desde que la conocí,he pensado que por su simpatía,su cordialidad y ese espíritu emprendedor y optimista de la vida podía ser una actriz muy exitosa, sobre todo en esas comedias ligeras que encantan a los ingleses y al público en general”.

Empresaria de su propia firma de moda, presentadora, cocinera e imagen de muchos productos cosméticos, Tamara Falcó ha demostrado ser una joven multifácetica. "Se ha tomado muy a pecho las clases que dicta en la pequeña pantalla".

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Escribe el Nobel de Támara Falco que "las estanterías de su cuarto se han llenado de libros de cocina que, me consta, estudia rigurosamente y pone en práctica, con lo que nos beneficiamos todos los residentes de esta casa".

A sus 39 años, Tamara Falcó, la única hija que tuvo el empresario Carlos Falcó con Isabel Preysler, es la nueva marquesa de Griñón, título que ha heredado de su padre.

"Siempre está de buen humor y siempre risueña.Incluso cuando va a misa, lo que hace puntualmente pues desde que se convirtióal catolicismo es una practicante muy estricta, como lo es tambiénsu abuela materna, que acaba de cumplir 98 añosy estáde una pieza".

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“Como lo estará Tamara,siempre alegre y contagiando su alegríaa los demás,cuando cumpla esa respetable edad. Que viva muchos anos para alegrar la vida de sus amigos y parientes es algo que esperamos todos los que la queremos. Y ojalásea así”,concluye. (I)