Luego del rompimiento entre Belinda y Christian Nodal vino la fase por la que todos los ex de la cantante mexicana pasan: borrarse el tatuaje que por amor se dibujaron en su piel. Al intérprete de “Ya no somos ni seremos” le tocó realizarse otra imagen para desaparecer el tattoo que un día le inspiró hacérselo en pleno romance con la hermosa diva de origen español.

Cuando todos pensaban que la pareja llegaría al altar, anunciaron sorpresivamente su separación en medio de dimes y diretes que habló mucho de lo que ambos vivieron en los meses de noviazgo.

Nodal borró cualquier rastro de su ex y la palabra Beli que tenía en su oreja derecha y los ojos tatuados en el pecho, quedaron en el pasado. Igual hizo su otro ex, Criss Angel quien fue el primero en tatuarse el nombre en diminutivo de la artista en su pecho. Luego de que se dijeran adiós, el famoso mago lo borró.

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Lupillo Rivera sobrepasó a estos dos hombres al elegir el rostro de Belinda para ser el retrato en su antebrazo izquierdo y cuando el final de su historia llegó, el cantante y hermano de Jenny Rivera, lo eliminó luego de comenzar una nueva relación con Giselle Soto. (E)

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