La reina Isabel II de Inglaterra ha agregado otro hito a su récord real.
Hasta el lunes 14 de junio, la gobernante de 96 años es la segunda monarca con el reino más largo en la historia mundial. Desde su coronación el 2 de junio de 1953, la Reina ha servido al Reino Unido y a la Commonwealth durante 70 años y 127 días.
Superó así al rey Bhumibol Adulyadej de Tailandia, quien fue coronado en 1946. Reinó durante 70 años y 126 días, antes de su muerte en 2016.
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La reina ahora sigue al rey Luis XIV de Francia, quien gobernó durante 72 años y 110 días, el reinado más largo conocido para cualquier soberano mundial. El Rey Sol asumió el trono a los 4 años en 1643 y gobernó durante la edad de oro de las artes y la cultura en Francia.
Lanzando una sentida declaración en honor a la ocasión, la monarca agradeció al público por su firme apoyo. “Cuando se trata de cómo marcar 70 años como su Reina, no hay una guía a seguir. Realmente es una novedad”, comenzó la Reina. “Pero me siento honrado y profundamente conmovido de que tanta gente haya salido a las calles para celebrar mi Jubileo de Platino”.
“Si bien es posible que no haya asistido a todos los eventos en persona, mi corazón ha estado con todos ustedes y sigo comprometida a servirles lo mejor que pueda, con el apoyo de mi familia”, continuó. “Me ha inspirado la amabilidad, la alegría y el parentesco que ha sido tan evidente en los últimos días, y espero que este sentido renovado de unión se sienta durante muchos años”, escribió la reina Isabel. “Les agradezco muy sinceramente sus buenos deseos y el papel que han jugado todos ustedes en estas felices celebraciones”.
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Durante la final del Jubileo de Platino el 5 de junio, la monarca hizo una aparición sorpresa junto a sus herederos en el balcón del Palacio de Buckingham. A ella se unieron el príncipe Carlos, Camila, la duquesa de Cornualles, el príncipe William, Kate Middleton y sus hijos, el príncipe Jorge, la princesa Charlotte y el príncipe Luis en un momento especial que representa el futuro de la monarquía.
El himno nacional, God Save the Queen, sonó mientras la familia cantaba. Los fuegos artificiales rojos, blancos y azules estallaron cuando Jorge miró a su bisabuela, y ella le devolvió la mirada con cariño.