Sonreír, abrazar y bromear… ¡sin cansarse! Observar de cerca a la influencer surcoreana Sujin Kim, más conocida en redes sociales como Chingu Amiga, es contagiarse de ese entusiasmo auténtico con el que recibió a sus cientos de seguidores que llegaron desde todo el país al Palacio de Cristal la tarde del sábado 1 de octubre para encontrarse con ella en el Budokan.

Le llevaron chocolates, fresas, manzanas, fotografías y una mochila con su nombre que la hizo saltar de la emoción. Los ecuatorianos, de todas las edades, no fueron tímidos en sus muestras de afecto por la carismática joven de 31 años que reside en México, pero cuya comunidad virtual se acerca a los 7 millones de seguidores en Instagram y YouTube.

Y es precisamente ese amor y espontaneidad latinoamericana lo que hizo que Kim escogiera Ciudad de México como su hogar permanente tras salir de su país natal, donde por mucho tiempo se sintió presionada por sobresalir en sus estudios y carrera profesional, a tal punto que afectó su salud emocional y mental.

Publicidad

Esa experiencia se recoge en el video La verdadera razón por la que no quiero regresar a Corea, publicado en su cuenta de YouTube en 2021. Por eso durante una conversación con este Diario en el Budokan admitió que no se siente realmente una embajadora de la cultura coreana, pero que sí quiere aprender cada día más sobre Latinoamérica. “¡Sufrí mucho en mi país, por eso me salí!”, bromeó. “Sí hay muchas cosas positivas, pero no se me ocurre alguna en este momento”.

¿Qué es lo que más te gusta de la cultura latina?

La gente es mucho más amable que mi cultura y la libertad que tienen ustedes, son muchos más relajados, saben divertirse con la vida, de eso me enamoré.

Publicidad

¿Qué países aún te faltan por conocer?

Me falta conocer Venezuela y más lugares de Centroamérica.

Publicidad

¿Qué te pareció la comida ecuatoriana?

Está muy rico todo, literalmente. Ayer probé un maduro en la calle y estaba todo riquísimo. Probé también cazuela y estaba rico, rico. Estoy enamoradísima.

Tras su paso por Guayaquil, su siguiente destino es Bogotá (Colombia).

¿Cuándo descubriste que te gustaban las redes sociales y compartir con tus seguidores?

Siempre fui maestra, siempre me gustó hablar con mis alumnos, pero cuando empecé con los videos, me di cuenta de que esta es mi vocación.

Publicidad

¿Cuándo te diste cuenta del alcance de tus videos?

Como empecé durante la pandemia y estaba en la casa, no lo percibía porque solamente estaba subiendo videos, pero después de un año y medio me nominaron en un evento y fui y me sentí como ¡¿qué está pasando?!

¿Y qué estaba pasando?

Me reconocían, me pedían fotos, ¡no podía creerlo! Todavía no puedo creerlo.

Las redes sociales también pueden ser una presión por subir contenido constantemente, ¿te ha pasado?

La verdad es que sí, mucho. Como todavía no me creo lo que está pasando, quizás mañana puede ser que desaparezca o pienso que ya nadie me va a querer. Tengo mucho miedo de esa idea, y aún no tengo la solución, así que aún no lo estoy enfrentando muy bien (risas), pero estoy haciendo mi mejor esfuerzo por disfrutar con ustedes al máximo.

¿Cuáles son tus próximos planes?

De Guayaquil viajaré a Bogotá y pronto me podrán ver en un programa muy, muy grande.