En medio del escándalo tras ser acusado de abuso sexual a una menor, el príncipe Andrés _por orden de la reina Isabel II_ perdió el tratamiento de Alteza real, sus títulos militares y las entidades que patrocinaba. Pero ahora se cuestiona si el segundo hijo de la monarca tendría que perder también el ducado de York.

Andrés, de 61 años, alcanzó un acuerdo financiero confidencial con Virginia Giuffre que le acusó de agresión sexual en 2001, evitando un juicio público en Nueva York que hubiera puesto en un aprieto a la familia real británica.

Giuffre, de 38 años, es una de las víctimas de Jeffrey Epstein, declarado culpable de pederastia por un tribunal de Florida, que se suicidó en una cárcel de Nueva York en 2019 mientras aguardaba otro juicio por tráfico y abuso de menores.

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La amistad de Andrés con este financiero, que defendió en una entrevista en 2019, provocó un escándalo que ya lo había obligado a retirarse de la vida pública.

Tras conocerse el acuerdo financiero, que podría ser de unos 16 millones de dólares, la prensa sensacionalista británica consideró que el duque está “acabado” y debería vivir en la “ignominia”.


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Título ducal

Andrés lleva el título de duque desde el día de su matrimonio con Sarah Ferguson, el 23 de julio de 1986. Este cargo tradicionalmente lo lleva el segundo hijo varón del monarca y lo ostenta de por vida.

Tras el acuerdo al que llegó el príncipe para evitar ir a juicio, casi dos tercios de los británicos cree que el segundo hijo de la reina debería perder su título de duque de York, según revela una encuesta de YouGov, detalla el Daily Mail. En todo caso, la Casa Real no tiene planes de despojarlo del ducado.

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Rachael Maskell, diputada laborista de York Central, indicó que “llevar un título crea una relación de embajador con ese lugar, y para un lugar con una reputación mundial, como York, esto es extremadamente importante. Es de agradecer que (Andrés) ahora se haya comprometido a apoyar la lucha contra los males del tráfico sexual y sus víctimas”.

De esta manera, sostiene que el príncipe debe renunciar a su título ducal, para demostrar su seriedad en este esfuerzo y su respeto por los afectados por los abusos y la gente de York.

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Maskell dijo que se había reunido con funcionarios de la Cámara de los Comunes para explorar formas de obligar al príncipe Andrés a renunciar al ducado. Indicó que si no lo abandona voluntariamente, buscaría que lo haga de otra forma, incluso modificando la legislación, en las próximas semanas.

Si bien Isabel II despojó a Andrés de títulos militares y patrocinios, la monarca por sí sola no puede quitar los títulos de nobleza. Cualquier intento de quitarle el título ducal tendría que ser dirigido por el Parlamento, a través de un estatuto aprobado tanto por la Cámara de los Comunes como por los Lores.

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En todo caso, no se espera que el príncipe participe en las celebraciones oficiales por el Jubileo de Platino -los 70 años del reinado de Isabel II-, previstas para principios de junio.

No obstante, el duque de York será visto en público a finales de marzo junto con el resto de la familia real con motivo del servicio religioso en memoria Felipe, duque de Edimburgo, fallecido en abril de 2021, que se celebrará en la Abadía de Westminster, en Londres. (I)