Ahora es conocido en todo el mundo como el jefe de un (¿ex?) miembro de la realeza británica. Alexi Robichaux, director ejecutivo y fundador de BetterUp, es el joven billonario que ha nombrado al príncipe Enrique como “director de impacto” (Chief Impact Officer) de esa startup (empresa de tecnología) domiciliada en Silicon Valley (San Francisco, California).

Durante una entrevista en video concedida a la BBC, y replicada en el portal de revista británica OK, Robichaux confesó que su nuevo empleado dedicó meses a pensar en aceptar esa propuesta laboral que, dicho sea de paso, seguramente viene acompañada de un jugoso sueldo que el curioso mundo desearía conocer.

La página web de BetterUp anunció el nombramiento del príncipe Enrique como “director de impacto” (Chief Impact Officer) con esta imagen, además de otros mensajes de bienvenida.

Sin embargo, este empresario nacido en 1985 ha preferido mantener en reserva esa cifra, lo cual es perfectamente legal (las leyes no lo obligan). Tampoco ha compartido cuántas horas semanales dedicará Enrique a su primer trabajo como simple civil y residente de Estados Unidos. “No me preocupo por las horas (de trabajo). Me preocupo por la contribución...”. Lo que sí se conoce es que la llegada de Enrique (así prefiere que lo llamen en el trabajo, o mejor dicho, Harry) supone un paso importante en una de las grandes ambiciones de Robichaux: participar en la bolsa.

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Príncipe Enrique de Inglaterra ya tiene su primer trabajo en una compañía

“Hace un mes, el director ejecutivo consiguió levantar casi 124 millones de dólares de financiación (valorando la empresa en 1.648 millones de euros), un dinero que prometió invertir –entre otros propósitos– en ‘fortalecer el crecimiento global’ de su empresa. Es decir, en aquello para lo que han fichado al príncipe”, publicó la revista Vanity Fair en su portal.

Bienestar para mayor productividad

¿A qué se dedica BetterUp? Pues en brindar coaching de salud, bienestar y fortalecimiento mental a empresas como la NASA, las cuales buscan reducir el estrés y la ansiedad de sus empleados para así mejorar su condición anímica y aumentar el rendimiento profesional.

“Be you at your best” (Sé tú en tu mejor versión) es el mensaje principal que aparece en su página web (betterup.com), acompañado de una breve explicación de sus servicios: “From big challenges to little changes, BetterUp offers personalized coaching, content, and care designed to transform lives and careers” (Desde grandes desafíos hasta pequeños cambios, BetterUp ofrece entrenamiento, contenido y atención personalizados diseñados para transformar vidas y carreras).

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Enrique, de 36 años, cree en ese propósito por sus experiencias entre los comandos de los Royal Marines, quienes por su estado mental supuestamente logran elevar su resistencia y capacidad física.

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El mismo portal incluye un saludo de bienvenida de Robichaux a Enrique: “Nos llena de energía su modelo de inspiración e impacto a través de la acción. Como un verdadero ciudadano del mundo, (Enrique) ha dedicado el trabajo de su vida a llamar la atención sobre las diversas necesidades de las personas en todo el mundo y a abogar por iniciativas de salud mental: desde la fundación de Invictus Games, una plataforma para que el personal de servicio utilice el deporte como parte de sus actividades psicológicas y rehabilitación física, hasta el lanzamiento de Sentebale, que apoya la salud mental y el bienestar de los jóvenes afectados por el VIH en Lesotho y Botswana”.

Robichaux, quien hace un año conoció al segundo hijo de Diana de Gales a través de un amigo en común, obtiene así un aliado monumental en su propósito de internacionalizar su empresa. Además, señala que Enrique “participará en todo, desde el diseño y la estrategia de producto hasta la cocreación de contenido y la experiencia de nuestros miembros”.

Robichaux comenzó profesionalmente en el departamento de negocio de Disney y fue gerente en un fondo de inversión, para luego fundar su primera startup, Socialcast. Su empresa fue adquirida por un grupo mayor, VMware, que le mantuvo como ejecutivo, pero en apenas un año y medio optó por renunciar a todo y fundar BetterUp, todo antes de cumplir los 30 años.

Su meta: emplear la tecnología para ayudar a reducir la frustración a los ejecutivos que, como él, en ocasiones sentían que el estrés del trabajo los estaba consumiendo. (I)

Fuentes: revistavanityfair.es y ok.co.uk.

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