La Orquesta de Cámara Delta: un sueño musical hecho realidad

El proyecto que comenzó hace siete años en la Unidad Educativa Bilingüe Delta como un club de violín para las estudiantes que estuvieran interesadas en ese instrumento, se convirtió rápidamente en un ensemble y hoy es ya una Orquesta de Cámara con 16 violinistas, 4 chelistas, 3 pianistas y con miras a seguir creciendo.

Cerraron el 2019 con su primera gran presentación en las instalaciones del centro de estudios y, aunque en 2020 suspendieron los ensayos presenciales debido a la pandemia, el amor a su arte motivó a sus integrantes a seguir buscando el tiempo para cultivar su habilidad musical desde casa.

Con el apoyo de los padres de familia, las autoridades de la institución y de otros docentes, Nancy Merino, directora de la Orquesta de Cámara Delta, pone todo su esfuerzo y talento en seguir perfeccionando el repertorio. Al principio, confiesa, las piezas musicales no fueron impecables.

“Porque una cosa es tener partes individuales y tu oído melódico desarrollado, pero es distinto desarrollar la parte armónica donde tienes dos o tres melodías que suenan a tu alrededor, pero tú tienes que mantenerte tocando la tuya”.

Pero hoy ya cuentan con un variado repertorio que incluye música nacional, popular y clásica, aunque aún no se han aventurado al género del jazz.

“El pasillo Ángel de luz les gusta mucho y ya tenemos varios años tocándolo y cada vez se va puliendo con más detalles, más instrumentos”, detalla Merino. “Dentro del repertorio clásico hemos tocado El Cascanueces, El vals de las flores (Tchaikovsky), el Concierto en sol mayor (Ravel) y Canon in D (Pachelbel), que también les encanta”.

Este año, apegándose a las medidas de bioseguridad están retomando los ensayos grupales y, cuando sea posible, no descartan realizar una gira con la orquesta. “Pero todavía hay que esperar a que sea seguro”.

La Orquesta de Cámara Delta cuenta además con la asesoría y mirada cercana del virtuoso violinista ecuatoriano Ecuador Pillajo. “Fue uno de nuestros invitados al concurso de Música Instrumental que realizamos en 2020. Está muy cerca del colegio y también del trabajo que se hace en nuestro segmento de violines, siempre nos está escuchando y apoyando”, comenta Merino.

El entusiasmo, disciplina y dedicación de las integrantes le permiten a su directora (y al público que las escucha) deleitarse con lo que denomina “el comienzo de un sueño realizado, de esa visión que creció desde el club de violín”.

El 2021 también marca la celebración del aniversario 30 de la unidad educativa, cumplidos el pasado 6 de mayo. “Durante estas tres décadas, el colegio siempre ha estado innovando y también muy pendiente del crecimiento de toda su comunidad (...) Ese es el espíritu del colegio, estar pendiente de lo que el mundo nos pide y necesita para tener a nuestras alumnas muy preparadas para ese mundo que les tocará vivir”, precisa Carlota Alvarado, coordinadora Media y quien colabora con la institución hace 23 años.