Hay canciones o melodías que acarician el alma que pueden convertirse en un torrente inmenso de agradables sensaciones que se apodera del ser. No hay explicación del porqué sucede, pero es más grande la necesidad de seguir escuchándola una y otra vez. Esto puede suceder con Tajabone.

Con nuevas notas y matices, el guitarrista, armónico y cantante africano Ismaël Lô irrumpió en la escena musical de Senegal. Lo hizo con su suave voz que envuelve por sus variadas texturas y estilo folk discreto. En sus presentaciones va acompañado por su banda compuesta por doce integrantes, quienes interpretan canciones mbalax complejas y cargadas de percusión, cuyas letras discuten temas importantes de su cultura que van desde el racismo, la niñez, la naturaleza y el respeto a la inmigración.

Una gran mayoría de la población senegalesa es musulmana, de allí que una de las canciones más populares de Ismaël Lô sea Tajabone, título que evoca la festividad musulmana de Tamkharit (Ashura), una celebración luego del Ramadán. Durante la fiesta los niños salen disfrazados a las calles para pedir regalos, cantar y bailar. Los mayores también intercambian comida, bebidas y telas. Es ‘la fiesta de la alegría’.

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Tajabone está escrita en wólof, el idioma más hablado en Senegal, pero no tiene estatus de oficial, ya que ese lugar lo ocupa el francés. Dakar -famosa por el rally- es su capital, la ciudad más poblada de ese país.

Ismaël (1956) nació en una familia musulmana en Dongo Buti (República de Níger). Es hijo de un padre senegalés y madre nigeriana, quienes se mudaron a Rufisque, Senegal, cuando el artista todavía era muy joven. Su padre tuvo dos esposas y entre ellas tuvieron 18 hijos. Es el único que se convirtió en músico.

Desde temprana edad le encantaba la música y sus primeras melodías las acompañaba con una guitarra casera de una cuerda. Sus primeras influencias americanas fueron Otis Redding, Wilson Pickett y Etta James, a quienes escuchaba por la radio. Fue uno de sus hermanos mayores que lo convenció para que toque en un programa de televisión local, Tele Variety, pero dijo que no la primera vez porque prefirió con sus estudios de decoración y pintura en una escuela de oficios. Pero la idea se le quedó y meses después la reconsideró y apareció en el programa. Fue un éxito rotundo, lo que lo convenció para dedicarse a tiempo completo. Por su segunda presentación Ismaël cobró $300.

Para 1979, el cantante y compositor senegalés Omar Pene lo invitó a Ismaël para que forme parte de Super Diamono de Dakar, una banda que tocaba mbalax-blues, una mezcla de ritmos cubanos y senegaleses. Lo consiguió y se estableció muy pronto como figura clave de la banda, por lo que se convirtió en el segundo cantante principal, cantante de respaldo y guitarrista rítmico.

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En los 80 comenzó a grabar como solista. Sus primeros álbumes incluyeron Xalat, Xiff, Natty Gor Sayina, y un álbum homónimo lanzado en 1992. Dos años después, Ismaël lanzó su segundo álbum de larga duración, Iso (llamado así por el apodo de la infancia de Lo). El álbum fue recibido con excelentes críticas en Francia, y luego realizó una gira por África. “La fama se volvió difícil de manejar, así que quería dar tiempo a que maduraran mis canciones. Me han criticado mucho, pero no fue premeditado, sucedió así: a veces hay que saber parar”, dijo al sitio Lemagazine.

Ya en los 90 fue invitado a actuar en L'Olympia junto con la cantante francesa Jane Birkin. En esa década lanzó un álbum cuyo título llevó su nombre, el cual contenía Tajabone. Después de recorrer el mundo durante unos años, un tercer esfuerzo en solitario, Dabah salió en 2001, y al año siguiente el Gobierno francés nombró al artista Caballero de la Legión de Honor. Recorrió Europa y África en el transcurso de los próximos dos años, y en 2006 lanzó Senegal y African Nights.

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Tajabone tiene un matiz más cercano en este lado del mundo. La canción formó parte de la banda sonora original de la película Todo sobre mi madre, dirigida por Pedro Almodóvar. En el filme aparece cuando Manuela (Cecilia Roth) está en el tren rumbo a Barcelona y recuerda que hace 17 años había hecho ese mismo trayecto.

Para mí, un artista está naturalmente comprometido, y no veo cómo denunciar las injusticias, es un compromiso. Decir, como hago en mis álbumes, que la dictadura es mala para la gente, que el racismo no debe existir y que debemos luchar por la paz, es natural, no se debe cometer".

Esa canción está cantada en wólof, como la mayoría de sus temas. Otra es Jammu Africa (Paz para África) que pone de relieve su sueño de un continente unido viviendo en paz y lejos de la pobreza. Un lugar donde no haya más muertes por la hambruna. “Estoy a favor del progreso, y creo que el hombre de hoy no usa una cuarta parte de su cerebro. Dios nos creó para desarrollar cosas, para ser creativos. Puede ser una solución para alimentar al mundo (...) Estoy a favor del progreso que va en la dirección correcta, pero que no perjudica a las poblaciones” (declaración en Lemagazine).

Ismaël, considerado ampliamente como el ‘Bob Dylan de la música de Senegal’, orienta sus canciones para hacer denuncias de carácter social, de cosas que pasan en su cultura. Temas como el matrimonio forzado, el racismo, la pobreza, el hambre, la paz o las relaciones entre las personas. También está muy implicado en campañas contra el VIH/sida. “Para mí, un artista está naturalmente comprometido, y no veo cómo denunciar las injusticias, es un compromiso. Decir, como hago en mis álbumes, que la dictadura es mala para la gente, que el racismo no debe existir y que debemos luchar por la paz, es natural, no se debe cometer. Cantando solo canciones de amor, ‘oh, eres hermosa como una flor, te amo, mi amor’, para mí, es el maná de las personas superricas que no tienen problemas en la vida. Hay muchas cosas a nuestro alrededor para hablar. Estoy pensando en Iraq, y también en Guinea, Casamance o Darfur. ¡Aún queda mucho por decir!”, ha comentado Ismaël en la misma página web francesa.

“No puedes forzar la música. Si tienes talento, no tengas un gran ego y no busques grandes éxitos, sucederán solos. Nunca pienses que has llegado a tu punto máximo porque cuando lo haces, no hay otro lugar a donde puedas bajar”. Es parte de lo que proclama este veterano artista que ha estado haciendo música durante décadas con más de diez álbumes y más de un puñado de superhits mundiales en su haber. (A. C. J.)

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