Medio siglo con Borges. Así se titula el libro que el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, le dedica al escritor argentino Jorge Luis Borges. El libro fue lanzado por la editorial Alfaguara, el 18 de este mes, de manera virtual.

"Creo que Borges es el escritor más importante de nuestra lengua en la actualidad. Figura ya entre los clásicos y tal vez si hay que compararlo con alguien habría que hacerlo con Quevedo, por quien sintió siempre gran admiración y del que hizo una espléndida antología hace muchos años", dice Vargas Llosa en una entrevista que concedió a www.elcultural.com.

El libro contiene una colección de artículos, conferencias, reseñas y notas da testimonio de más de medio siglo de lecturas.

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Para el escritor peruano, Borges es un autor que desde que leyó sus "primeros cuentos y ensayos en la Lima de los años cincuenta, una fuente inagotable de placer intelectual".

"Muchas veces lo he releído y, a diferencia de lo que me ocurre con otros escritores que marcaron mi adolescencia, nunca me decepcionó; al contrario, cada nueva lectura renueva mi entusiasmo y felicidad, revelándome nuevos secretos y sutilezas de ese mundo borgiano tan inusitado en sus temas y tan diáfano y elegante en su expresión", dice el autor de Los cuentos de la peste en un post de Alfaguara en Instagram.

"Siempre leí a Borges no solo con la exaltación que despierta un gran escritor; también, con una indefinible nostalgia y la sensación de que algo de aquel deslumbrante universo salido de su imaginación y de su prosa me estará siempre negado, por más que tanto lo admire y goce con él", agrega.

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Varga Llosa también menciona que "el puñado de libros que escribió, libros siempre breves, perfectos como un anillo, donde uno tiene la impresión que nada falta ni sobra, han tenido y tienen una enorme influencia en quienes escriben en español".

Parte de una entrevista de Vargas Llosa a Borges en junio de 1981 (Buenos Aires), publicada en Diario El País.

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MARIO VARGAS LLOSA. Me ha impresionado mucho al ver su biblioteca no encontrar libros suyos, no hay ni uno solo. ¿Por qué no tiene libros suyos en su biblioteca?

JORGE LUIS BORGES. Cuido mucho mi biblioteca. Quién soy yo para nombrarme con Schopenhauer...

MVLL. Y tampoco libros sobre usted, veo que tampoco hay ninguno de los muchos libros que se han escrito sobre usted.

JLB. Yo leí el primero que se publicó durante la dictadura, en Mendoza.

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MVLL. ¿Cuál dictadura, Borges? Porque desgraciadamente ha habido tantas...

JLB. La de aquel..., de cuyo nombre no quiero acordarme.

MVLL. Ni mencionarlo.

JLB. No, tampoco, no. Algunas palabras es bueno evitarlas. Bueno, pues se publicó el libro Borges, enigma y clave, escrito por Ruiz Díaz, un profesor mendocino, y por un boliviano, Tamayo. Y yo leí ese libro a ver si encontraba la clave ya que el enigma lo conocía. Después no he leído ningún otro. Alicia Jurado escribió un libro sobre mí. Yo le agradecí, le dije: “Sé que es bueno, pero el tema no me interesa o quizás me interesa demasiado, conque no voy a leerlo”.

MVLL. Y tampoco ha leído entonces esa voluminosa biografía que ha publicado Rodríguez Monegal sobre usted.

JLB. ¿Y qué me dices, que es muy buena?

MVLL. Por lo menos muy documentada y hecha realmente con una gran reverencia, un gran afecto por usted y un gran conocimiento, creo, de su obra...

MVLL. ¿Mencionaría algún novelista entre los autores que considera más importantes o son sobre todo poetas y ensayistas?

JLB. Y cuentistas.

MVLL. Y cuentistas.

JLB. Porque no creo que Las mil y una noches sea una novela, ¿no? Una infinita antología.

MVLL. La ventaja de la novela es que todo puede ser novela. Creo que es un género caníbal, que se traga todos los géneros.

JLB. A propósito de “caníbal”, ¿usted conoce el origen de la palabra?

MVLL. No, no lo conozco, ¿cuál es?

JLB. Muy linda. Caribe, que dio caríbal, y caníbal.

MVLL. O sea que es una palabra de origen latinoamericano.

JLB. Bueno, sin “latino”. Eran una tribu de indios, los caribes, una palabra indígena, y de ahí surgió caníbal y Calibán, de Shakespeare.

MVLL. Curioso aporte de América al vocabulario universal.

JLB. Hay tantos. Chocolate, que era xocoatl, creo, ¿no? Se perdió la tl, desgraciadamente. Papa, también.

MVLL. ¿Cuál diría usted que ha sido el mejor aporte en el campo de la literatura de América? De toda América: América hispana, portuguesa... ¿Algún autor, algún libro, algún tema?

JLB. Yo diría más bien el modernismo en general. Era obra de la literatura en lengua castellana, y eso surge de este lado, según lo hace notar Max Henríquez Ureña. Hablé con Juan Ramón Jiménez y él me dijo de la emoción con la cual había recibido un ejemplar de Las montañas del oro, año 1897. Y su influjo en grandes poetas en España. Pero eso surge de este lado. Y curiosamente, estamos aquí —no geográficamente— mucho más cerca de Francia que los españoles. Yo me di cuenta en España que podía alabar a Inglaterra, alabar a Italia, alabar a Alemania, alabar incluso a Norteamérica, pero que si hablaba de Francia ya se sentían incómodos...

MVLL. ¿Hay algún político contemporáneo que usted admire, que respete?

JLB. Yo no sé si uno puede admirar a políticos, personas que se dedican a estar de acuerdo, a sobornar, a sonreír, a hacerse retratar y, discúlpenme ustedes, a ser populares...

MVLL. ¿Qué tipos humanos admira usted, Borges? Aventureros...

JLB. Sí, los he admirado mucho pero ahora no sé. Tienen que ser aventureros individuales.

MVLL. ¿Cuál, por ejemplo? ¿Recuerda algún aventurero que le hubiera gustado ser?

JLB. No, a mí no me gustaría ser otra persona. (I)