Los BRIT Awards, premios a la música británica, son todo un acontecimiento en la industria musical comparables a los Grammy en EE. UU. Geri Halliwell lo entendió muy bien, por lo que la noche del 24 de febrero de 1997 se puso como objetivo dar un show memorable y dejar su huella.

En esa jornada las Spice Girls se llevaron a casa los premios a mejor single británico, por Wannabe; y mejor videoclip británico, por Say You'll Be There. El grupo femenino más famoso de la historia estaba en la cúspide de la fama y en los BRIT Awards se esperaba con ansias su presentación en vivo.

Se presentaron con un medley de Wannabe y Who Do You Think You Are. Todas las integrantes saltaron al escenario con sus estilos característicos, pero fue Geri y su vestimenta lo que quedaría en la retina de sus fans por mucho tiempo.

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Spice Girls Live At Brit Awards 1997 from carlos almeida on Vimeo.

Ginger Spice, su apodo en el grupo, lució un cortísimo vestido que resaltaba la bandera de la Union Jack y el símbolo de la paz. La entonces atrevida cantante acaparó todas las miradas por su picardía y patriotismo. Ella misma rememoró hace unos días a la revista Vogue lo que hizo para llevar esta prenda.

Los fans casi se pierden de ver este traje. La artista recuerda que los estilistas del grupo le aconsejaron llevar a la gala un minúsculo vestido negro de Gucci, firma entonces a cargo de Tom Ford. Sin embargo Geri no creyó que el vestuario era lo suficientemente especial para la ocasión y se le ocurrió que la Union Jack sería el mejor atuendo que podía lucir tratándose de la noche de la música británica.

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De esta manera la cantante y su hermana se pudieron manos a la obra. Tomaron un paño de cocina en lugar de cortar una bandera auténtica, evitando así ofender a los más patriotas, y empezaron a darle forma a la pieza. ''Siempre he sido una especie de diseñadora de moda en la sombra… pero fue ella (hermana) quien lo hizo porque cose mejor que yo'', contó la Geri, quien ahora está dedicada a la vida familiar.

Ginger le presentó su creación a su estilista, pero esta tuvo miedo de que el público interpretara el diseño como apoyo a un partido de extrema derecha de ideología fascista. Para evitar esto la cantante le cosió en la espalda el símbolo de la paz gigante y así evitar malentendidos y ''celebrar todas las culturas''. Pero la historia no queda allí, ya que las botas rojas con plataforma customizadas también fueron creadas por ella misma. ''Mi padre es mecánico, así que le cogí la pintura roja para autos y se la rocié por encima para que hicieran juego'', rememora. ''La longitud del vestido representaba la sexualidad y las grandes botas lanzaban el mensaje de 'no te metas conmigo', puntualiza.

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Al siguiente día su estilo copaba la primera plana de multitud de periódicos y revistas del espectáculo. Geri había logrado el vestido se convierta en un ''símbolo de poder femenino''. ''La gente empezó a llevar sus propias versiones y de repente empezamos a ver la bandera británica en un montón de creaciones de moda'', indica la cantante, quien posteriormente lució otras versiones del mismo a lo largo de los años.

El vestido ocupó el primer lugar en una encuesta en línea de 2010 para encontrar los 10 vestidos más emblemáticos de los últimos 50 años, superando a otras prendas memorables como el vestido de cuello blanco 'Seven Year Itch' de Marilyn Monroe. En 2016, el vestido fue votado como el Momento de la moda británica más inspirador en una encuesta en línea realizada por el minorista en línea británico Very.

La prenda hoy es propiedad de Hard Rock Cafe tras adquirirlo en una subasta de Sotheby’s por 45 000 euros. En tanto que la memorable presentación de las Spice Girls en los Brits del 97′ fue premiada en 2010 como la mejor actuación en estos premios en 30 años. (E)