Game of Thrones (GOT) ha dominado los Premios Emmy con el formidable poder de, digamos, un dragón lanzando fuego. Lo mismo se puede decir de Veep, pero imaginen en vez a una política feroz. Ambas series –la primera de drama, la segunda de comedia– están entre las favoritas para la ceremonia del domingo por sus respectivas temporadas finales, una última oportunidad de brillar.