En uno de los últimos partidos de su legendaria carrera, la estadounidense Serena Williams sufrió este martes una fulminante derrota ante la joven británica Emma Raducanu en la primera ronda del torneo WTA 1000 de Cincinnati.

Williams, de 40 años, cayó ante Raducanu, de 19, por 6-4 y 6-0 en 65 minutos de juego y abandonó la pista central con una sonrisa y agradeciendo el gran apoyo de los aficionados de Cincinnati (Ohio).

Ganadora de 23 torneos de Grand Slam, Williams ha indicado que su retirada de las pistas está próxima y podría tener lugar tras su participación en el Abierto de Estados Unidos que arranca el 29 de agosto.

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La defensora de este título de Grand Slam será la propia Raducanu, quien este martes ofreció una de sus mejores actuaciones desde su sorprendente victoria de 2021 en Flushing Meadows (Nueva York) pese a la presión de jugar ante una de sus grandes ídolos en el tenis.

“Estuve nerviosa desde el primer punto hasta el último”, reconoció después Raducanu. “Serena es peligrosa y puede remontar cualquier situación (...) Tuve que mantener la concentración. Estoy muy contenta de haber conseguido mantener la compostura”.

Para Williams, ganadora en Cincinnati en 2014 y 2015, era apenas el cuarto partido de 2022, un curso en el que solo ha logrado un triunfo frente a la española Nuria Parrizas la semana pasada en el torneo WTA de Toronto.

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Tras recibir una gran ovación de sus seguidores a su llegada, Williams arrancó en frío el partido cediendo su servicio en las dos primeras oportunidades y permitiendo que Raducanu se avanzara 4-1.

Aunque después compensó uno de los dos quiebres perdidos y se acercó 4-3, la californiana siguió encadenando errores no forzados que facilitaron que Raducanu se anotara el primer set en 39 minutos.

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En la segunda manga, la británica pisó el acelerador ante una Williams que fue desfalleciendo hasta arrojar la toalla, pensando ya en la probable y emotiva despedida en el Abierto de Estados Unidos. (D)