Día “duro” en el Giro de Italia, con el Goletto de Cadino y el Passo del Mortirolo como máximas exigencias, al final definición al esprint por el tercer lugar, que dejó relegado a Richard Carapaz sobre el australiano Jai Hindley.

Pese al resultado, el ecuatoriano dijo estar “contento”, aunque perdió cuatro segundos que pueden marcar diferencia en la clasificación.

Creí que podía ganar el esprint, pero han sido segundos favorables para Hindley. Mantenemos la maglia rosa y es lo importante”, dijo Carapaz en la meta de Aprica.

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“Ha sido un día muy duro para todos”, enfatizó el campeón olímpico tras una etapa de 202 kilómetros y tres puertos de primera categoría.

Definido el final de la jornada a favor del checo Jan Hirt, la atención se centró en la pelea de los favoritos y la pelea del equipo Bahrein-Victorius para colocar adelante a Mikel Landa.

Carapaz, Hindley, Landa y Joao Almeida (UE-Team Emirates) fueron en busca de los fugados, con un “final húmedo que ha sido peligroso, pero lo hemos hecho bien. Trabajamos pensando en el final”, dijo el tricolor.

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Carapaz reconoció que el trabajo del Bahrein “marcó diferencia” y “rompió” la carrera. “Pusieron un ritmo muy fuerte y eso movió todo para el final.

Si bien se ajustó la pelea con Hindley, la diferencia con Almeida, tercero, se amplió a 44 segundos, mientras que Landa quedó a 59.

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“Ha sido un trabajo importante, Almeida ha perdido segundos valiosos. Landa y Hindley son peligrosos, pero los tres hemos sido fuertes en el último ascenso y estamos ahí. El Giro es reñido”, apuntó.

Con cinco etapas por delante y tres de estas en montaña, Carapaz espera mantener la ventaja y la maglia rosa. “Tenemos etapas duras hasta el final”, concluyó el ecuatoriano. (D)