Portugal exigirá presentar un test de COVID-19 con resultado negativo para acceder a los estadios de fútbol y al resto de recintos deportivos a todos los asistentes, incluso a los vacunados, a partir del 1 de diciembre.

La medida fue anunciada este jueves por el primer ministro, António Costa, y será aplicada en todos los partidos, también en la última jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones.

El día 7 de diciembre, el Oporto recibe al Atlético de Madrid, y el 8 el Benfica juega en Lisboa con el Dinamo de Kiev.

Publicidad

La exigencia de test se aplicará también al derbi entre el Benfica y el Sporting, que promete llenar el Estadio da Luz (unos 65.000 espectadores) el viernes 3 de diciembre.

A pesar de las nuevas medidas, no se limitará el aforo de los estadios.

Portugal vive su quinta ola de coronavirus, con un aumento de los contagios -la incidencia está en 251 casos por 100.000 habitantes- y de las hospitalizaciones. (D)