Fuera de Universidad Católica y dos meses después del partido ante Barcelona, el mediocampista Luis Chicaiza reavivó la polémica de un partido en el que las dos escuadras perseguían distintos objetivos, sin hacerse daño en el resultado final (0-0).

Con un partido discreto, el empate del 20 de diciembre en el estadio Atahualpa aseguró la clasificación de los toreros a la final de LigaPro y a los camaratas el boleto para Copa Libertadores. Mucho se habló los días previos sobre los intereses de los dos clubes para ese compromiso, algo que Chicaiza topó el miércoles en diálogo con radio Huancavilca.

“Hubo cosas que no estaban bien o había decisiones que el momento del partido se las quería tomar, órdenes de otras decisiones que no iban conmigo, con mi personalidad. Yo jugué (ese partido) como siempre lo he hecho, porque para entrar a una cancha a perder, prefiero no volver a jugar”, dijo el volante imbabureño, fichado para el 2021 por Deportivo Cuenca.

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“Hay cosas que no digo yo, lo vio todo el país”, dijo Chicaiza, sustituido en ese partido al minuto 58, según el jugador, a consecuencia de una acción en la que remató al pórtico de Barcelona. “Después de esa jugada se dio el cambio, juzguen lo que pasaba en ese momento con el tema del equipo. Esas cosas quedan marcadas, pero hay que decir que el fútbol se debe jugar con honestidad”, apuntó.

‘Los malos del paseo’

El técnico de Católica, Santiago Escobar, hizo referencia a lo expuesto por Chicaiza, dijo estar tranquilo con su manejo del equipo y apuntó al “resentimiento y malestar” de un jugador que no fue regular en la temporada.

Consultado en la programación de CDF 7/10 sobre el cambio de Chicaiza, el técnico cafetero señaló que “pretendía terminar con jugadores de banda ese partido, como jugamos toda la temporada. No teníamos a algunos elementos y se buscó una oportunidad para Édison Guerrero”.

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Escobar habló también de la falta de regularidad que tuvo Chicaiza en su plantel. “En el caso particular del jugador, cuando fue inicialista salió al cambio, sobraría esa explicación, pero la digo porque el cambio se justificaba y porque como señalo a mis jugadores, escritura de titularidad ninguno la tiene en el equipo”.

Chicaiza fue figura en la campaña de Delfín, subcampeón el 2017, llegó a Liga de Quito dos años después y no pudo repetir su actuación. Para el 2020 fue cedido a Católica y su rendimiento fue a la baja, con 21 juegos en toda la temporada.

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Entre las justificaciones del jugador para su rendimiento en las dos últimas temporadas estaría el hecho de que llegó sin consentimiento de los cuerpos técnicos de Liga y Católica, algo que Escobar descartó.

“Se busca siempre el beneficio colectivo, en el caso de Católica todos los jugadores que llegan tienen aval del cuerpo técnico. Ojalá que (Chicaiza) sea titular en Cuenca, que brille y que muestre el fútbol que tiene, porque con lo que ha expuesto los malos del paseo somos el profesor (Pablo) Repetto y Santiago Escobar, pero dejémoslo así”, concluyó el estratega. (D)