Duende caprichoso, travieso, bromista que ríe de sus tropelías, eso es el destino, a veces cruel, a veces tierno. De destino puede hablar mucho Stephen "Steve" Brian Hodge, 58 años, exmediocampista del Nottingham Forest, Aston Villa y otra media docena de clubes ingleses entre 1980 y 1998. Steve ha sido en estos días un bocado apetecido por la prensa británica. Él fue el número 18 de Inglaterra en el Mundial de México 1986 y el que, sin querer, en el minuto 51 dio un riesgoso pase alto hacia atrás para su arquero Peter Shilton en el celebérrimo partido frente a Argentina. Al advertir el envío, con todas sus antenas alertas, Maradona picó a buscarlo, saltó y marcó el gol con la mano. En verdad se impulsó para cabecear y anticipó a Shilton, pero al ver que no llegaba con la cabeza dio disimuladamente un golpe de puño a la pelota y se produjo uno de los goles más polémicos de la historia del deporte. No había VAR, los 114.580 espectadores en el estadio Azteca empezaban a discutir con qué lo había convertido. Ya en vestuarios, un periodista preguntó a Maradona si había marcado ese gol con la mano y Diego, con picardía, dijo “fue la mano de Dios”.
















