Actualizada a las 19:30

La Comisión Disciplinaria de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) decidió este martes abrirle un expediente a Michael Arroyo y llamarlo a rendir declaraciones, luego de que se confirmó que el futbolista de Barcelona dio positivo en un control de dopaje, situación que el jugador de 31 años afronta por segunda ocasión en su carrera deportiva.

“La comisión ha resuelto abrir el expediente respectivo y convocarle al jugador (a rendir declaraciones). Está citado para el próximo miércoles (28 de noviembre) a las 09:30”, detalló Galo Sánchez, principal de dicha mesa de la FEF.

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El delegado de la Ecuafútbol añadió que el representante de Arroyo se reunió ya con la Comisión Médica de la FEF y rechazó acceder al análisis de una muestra B, uno de los recursos que podría usar en su defensa.

En tanto, el abogado de Barcelona, Jorge Reinoso, detalló que la sustancia prohibida hallada en la prueba es la hidroclorotiazida, un diurético.

“De acuerdo a lo que determina FIFA y nuestro reglamento, el jugador está ya suspendido. Las sanciones por dopaje son internacionales automáticamente”, dijo Sánchez.

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Arroyo se expone así a una una suspensión deportiva de por vida, luego de que ya fuera sancionado por dopaje en 2007, cuando jugaba en Emelec. (D)