Walter Bello Rodríguez, maestro de la Academia Juan Gómez Rendón, entrenador, catorce años seguidos campeón colegial de atletismo con el Vicente Rocafuerte y educador del colegio Americano, recibió homenaje al bautizarse con su nombre un nuevo coliseo.

Es de esos profesores que fuera de sus horas de clases descubrieron cualidades y talentos entre sus alumnos y despertaron en ellos el interés por la práctica formal de los deportes. Desarrollaron y mejoraron las cualidades motrices, les enseñaron a trabajar en equipo, les inculcaron respetar a compañeros, adversarios, árbitros, a administrar con sencillez las victorias y, sobre todo, a levantarse de las derrotas.

La historia señala muchos nombres y como un reconocimiento colectivo, un poco desordenado, me permito mencionar a aquellos que descubrieron a deportistas que luego se convirtieron en grandes estrellas. 

Publicidad

Cómo no recordar a Honorato Haro, referente del básquet; sus pupilos lo honran con una fundación que lleva su nombre. Miguel Roque Salcedo, maestro en toda la extensión de la palabra, profesor de altísimo nivel académico y un periodista muy connotado. Rómulo Viteri, en atletismo; fue director del Instituto de Educación Física; Denis Dau, en la dirección de deportes del Vicente Rocafuerte y propulsor del Interbarriales de este Diario, torneo que mueve y activa miles de equipos y niños. También Alberto Bayas, gran motivador de las pesas, del deporte para discapacitados y también en el Instituto de Educación Física.

A docentes como Gustavo Maridueña, preparador físico de Emelec, Everest y Nueve de Octubre. Otro vicentino, Duffer Alman, brillante en la preparación física y mentor de algunos destacados futbolistas profesionales. Edilberto Beto Ruiz, Jorge Delgado Guzmán, guardameta del Barcelona que estuvo en las victorias sobre Millonarios (la de 1952), maestro vicentino, PF de muchas selecciones y comentarista deportivo.

Desde la Subdirección de Educación, Piedad Murriagui, Justo Nieto, Telmo Fajardo y la inolvidable maestra Julia Martínez. En estricta justicia hay que mencionar la dinastía de los Caballitos: Víctor Zevallos Mata, Enrique Zevallos Avellaneda y Enrique Zevallos Márquez, toda la vida vinculados al básquet. Hay que mencionar a Francisco Ochoa, León Chicho Palacios, Fortunato Muñoz, nuestro maestro en el Vicente.

Publicidad

Del Aguirre Abad debemos destacar a Édgar Andrade, Zorobabel Coral, José Murillo, Jorge Portalanza, Jorge Tolozano, Álex Miranda, Miguel De La Torre, Raúl Estrada y muchos más. En la gimnasia olímpica es obligatorio nombrar a Pedro y Abel Rendón, Leonidas Parrales, Julio Palacios.

Para escribir la historia del departamento de deportes del colegio Guayaquil se necesitarán muchas páginas. Estuvieron Emma Castro, Mercedes Guime de Vera, Olicia Maridueña, Enni Chonquí, Marta Salazar, Carmen Matos, Elizabeth Álvarez; Darío García, técnico de atletismo; Alfredito García Yánez, en tenis de mesa; Cásar Jiménez, de natación. La plantilla del Vicente Rocafuerte fue más completa, la mejor del pías. Contaban con maestros de todas las disciplinas y se dieron el lujo de tener escuelas deportivas que nutrían a las selecciones de todas sus categorías con la conducción de José Carbo Robles, Fernando Rodríguez Jarrín (medio siglo en el magisterio, hasta su jubilación), Francisco Jiménez, Denis Dau Karam.

Publicidad

La natación creció con la llegada de Gastón Thoret, los hermanos Fuentes (Agustín, uno de ellos), Roberto Frydson, Elmo Cura Suárez, Luis Bajaña, Jorge Delgado. En voleibol hay que destacar al teniente Luis Sandoval, Sebastián Alvarado, Patricio Sandoval, Félix Robledo.

Entre las damas enfatizar a Reina Flores, Isabel León –campeona bolivariana de básquet–, Fanny Díaz de Janón, Julia Santillán, Isabel Ballén, Mercedes Delgado, Raquel Mariscal, Anita Espinoza, Melba Hurtado, Cecilia Guerrero. En ajedrez a Víctor Hugo Carrillo, Miguelito Dillon, Carlos Camatón. Norman Carrillo en tenis de mesa. Ricardo Montalvo, Miguel Villacrés, Julio San Miguel, en atletismo. María Cangá y Anturo Bravo, en artes marciales. Antonio Rodríguez, Pablo Rico, David Aparicio, Hugo Angulo, Napoleón Gamboa, Washington Vanegas, Jesús Cárdenas, Robespierre Rivas, y muchos más.

Jaime Tevez condujo la selección de atletismo del Cristóbal Colón que conquistó por catorce años el título. Racha ganadora que fue cortada por el Vicente Rocafuerte, con entrenadores como Bartolo Espinoza, Ricardo Quinteros y Walter Bello, que ganaron para el VR catorce campeonatos consecutivos, hegemonía interrumpida por otra maestra: Fátima Navarro del Espíritu Santo, gran formadora de muchos atletas.

En el acto de reconocimiento a Walter Bello estuvieron sus alumnos, entre ellos Jorge Gallardo, quien contó que como feliz coincidencia lo tuvo como maestro en la academia Juan Gómez Rendón y luego en el Americano, que ahora tienen como director a Fersen León y como directora de deportes a Mónica Arauz, quienes explicaron con detalles las razones para tal homenaje.

Publicidad

Abrazos, fotos, recuerdos, anécdotas y en algún instante alguien sacó una palmeta de madera para recordar que con ella Walter Bello aquietaba algún desborde de los jóvenes. ¡Cuánta falta hace una regla de esas para enderezar rumbos a tantos niños y jóvenes que se salen del camino! Fue una linda jornada, llena de emociones y recuerdos la que se perennizó con la imagen del maestro que se ganó el cariño de sus alumnos, colegas y padres de familia.

La sociedad no ha sido muy justo, no se les ha reconocido su dedicación. Muchos se fueron en voz baja, solo se retiraron con la satisfacción de haber contribuido al desarrollo del deporte ecuatoriano y con el aprecio de sus alumnos, que los recuerdan con mucho cariño. (O)

Walter Bello, recordado formador de atletas del colegio Vicente Rocafuerte y de la academia Juan Gómez Rendón, recibió un justo reconocimiento de sus exalumnos.