El uruguayo Rubén Olivera, volante de Liga de Quito, estará mínimo 21 días fuera de las canchas, debido a una lesión, informó este lunes el médico de los universitarios, Juan Barriga.

"Tiene una distensión del ligamento interno de la rodilla derecha. Eso significará que por lo menos esté a órdenes del cuerpo médico unas tres semanas", explicó el galeno.

La lesión se produjo al minuto 51 del partido entre Liga y Clan Juvenil, jugado el pasado domingo, cuando al Pollo Olivera se le quedó atascado el zapato en el gramado de la cancha del estadio General Rumiñahui. Eso le impidió seguir en el partido, y Barriga pidió al técnico Gustavo Munúa que lo reemplazara.

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El jugador, de 33 años, comenzó la rehabilitación y lo primero será esperar que desinflame la zona afectada y luego fortalecer la musculatura, explicó el médico.

Olivera, llamado a ser el eje del mediocampo blanco, y quien en los 51 minutos no figuró, se perderá como mínimo los partidos ante Delfín, Emelec y River Ecuador.

Además de la baja del charrúa, aún es incierto si la dirigencia universitaria logrará este martes habilitar en la Ecuafútbol al delantero argentino Hernán Barcos, de quien no llegaba la documentación.

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En otro aspecto, el técnico Gustavo Munúa dijo tener una "sensación amarga", debido al empate (0-0) que se dio entre Liga y el novel Clan Juvenil.

No obstante, aseguró estar "contento con el equipo (blanco)", por el protagonismo que mostró. "Tuvimos algunas opciones muy claras, pero no se dieron, la pelota no quiso entrar", comentó el entrenador.

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El uruguayo indicó que el primer gol pudo haber llegado si se marcaba "un claro penal", en alusión a una acción donde Felipe Rodríguez cayó en el área, pero el árbitro Luis Quiroz no dictaminó como falta. La jugada fue polémica.

Rodríguez, a su vez, no solo reclamó este supuesto penal, sino también otro que, según él, le cometieron al minuto 87. En esta última acción, el charrúa se lanzó al piso. (D)