Transiciones rápidas de defensa al ataque y los contragolpes son la nueva moda en el fútbol, después de una era en la que imperó la posesión de la pelota, según un análisis de la FIFA de las tácticas utilizadas por las selecciones en la Copa del Mundo.

"La moda es que los equipos jueguen proponiendo y hagan todo lo posible por ganar el partido, en vez de jugar para 'no perder''', señaló el grupo de expertos que trabajó en Brasil, según el informe presentado el viernes.

Los mejores equipos fueron premiados por "no tener miedo a perder la compostura por breves momentos", destacó el documento de 284 páginas.

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"Transiciones extraordinariamente rápidas y tácticas de contragolpe" fueron las estrategias más efectivas en el Brasil, que empató la máxima cifra de goles en un Mundial y es considerado como el mejor en décadas.

La historia fue bastante distinta hace cuatro años, cuando España ganó su primer Mundial con un juego en el que primó la posesión de la pelota.

El fútbol fue tan aburrido en Sudáfrica que el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, pidió a un grupo especial que analizara formas de hacer el espectáculo más entretenido.

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Aunque ese grupo hizo poco, fueron las selecciones, los técnicos y los futbolistas los que cambiaron el panorama en Brasil.

"El ritmo del juego fue impresionante. Brasil 2014 fue uno de los Mundiales en los que más rápido se jugó, sino el más rápido", señaló el informe.

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Otra tendencia exitosa en Brasil fue jugar con al menos dos delanteros, tres centrales y sólo un mediocampista de contención.

Los incidentes polémicos, como el mordisco de Luis Suárez a un oponente y los futbolistas que siguieron jugando tras golpearse la cabeza, no fueron mencionados en el informe.

Tampoco hubo muchas críticas a los equipos, aunque la selección de Brasil no se salvó tras ser goleada por Alemania y Holanda en semifinales y el partido por el tercer lugar.

"Un mal desempeño incomprensible ante Alemania", menciona el informe sobre el partido que Brasil perdió 7-1, "fue un justo reflejo de las fortalezas de ambos equipos".

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Los entrenadores de la FIFA destacaron que "el ataque (de Brasil) no engranó y hubo algunos problemas obvios en la coordinación de su defensa".

El informe destaca que las mejores selecciones ya no utilizan dos volantes de contención, una táctica que fue efectiva en Sudáfrica, y también pasó la moda de un solo atacante.

"La mayoría de los equipos jugaron con dos delanteros (sino tres), y los pocos equipos que jugaron con un solo delantero fueron eliminados temprano", señala.

Los arqueros como el alemán Manuel Neuer ahora funcionan casi como un defensor adicionales, y técnicas especializadas de entrenamiento deben reflejar esa tendencia, indica.

El informe menciona que jugar con tres centrales es una táctica que "vuelve a estar de moda" gracias a los resultados de Holanda (tercer lugar), Costa Rica, Chile, México y Uruguay.

Después que España conquistó el Mundial hace cuatro años con su juego de posesión "tiki-taka", el informe destaca que ahora es más importante ser efectivo con la pelota que simplemente tenerla.

En Brasil, 21 de los 64 partidos fueron ganados por equipos que tuvieron menos posesión y contragolpearon.

"La posesión tiene que ser eficiente y no estéril", destaca el informe, y apuna que 34 de los 171 goles anotados en Brasil fueron en "transiciones rápidas".

"Las tácticas de contragolpe alguna vez fueron una herramienta en el arsenal de los equipos, pero ahora algunos equipos diseñan todo su juego en base a estas tácticas", indica.

Hubo más goles de los esperados en jugadas de tiros de esquina y centros de "notable" calidad, y los equipos que empezaron perdiendo usualmente le dieron vuelta al marcador.

Las tácticas en defensa incluyeron presionar la salida agresivamente los primeros 15 minutos, y mantener la única línea al menos a 40 metros del arco.

"Los equipos defendieron en un bloque compacto y adelantado, y poblaron el área donde estaba la pelota", señala el informe.

Costa Rica, que sorpresivamente llegó hasta los cuartos de final, recibió elogios por los avances en su fútbol, al igual que otros equipos de la Concacaf como México y Estados Unidos.

"El buen trabajo de desarrollo significa que se acortó la brecha entre los equipos (de la Concacaf), lo que automáticamente significa que hay una buena competencia y se mejora el nivel del fútbol", menciona el informe.