El entrenador del Arsenal, el francés Arsene Wenger, aseguró que los “tontos e irrespetuosos” ataques verbales de su colega del Chelsea, José Mourinho, “avergüenzan” al club blue, según publicaron ayer los diarios británicos.

Wenger efectuó esas declaraciones tras derrotar el domingo al Liverpool en la Copa de Inglaterra (2-1), dos días después de que el luso lo insultara llamándolo “fracasado”.

“Lo único que entiendo es que es más embarazoso para el Chelsea que para mí. Honestamente, a mí me da vergüenza por él. No me interesa el tema en absoluto. Esa es la verdad”, dijo Wenger a la cadena de televisión BT Sport.

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También el exportero de Arsenal, Bob Wilson, se unió a la polémica y defendió al galo al considerar que Mourinho es un “abusador” que “aburre con sus juegos psicológicos”.

El luso cargó el viernes anterior contra Wenger porque este había dicho primero que el Chelsea no admite que es favorito para ganar la Liga Premier por “miedo a fracasar”.

‘Culpa de la prensa’
“Muchas cosas de las que suceden son culpa de la prensa. Yo soy el chico malo y luego están los educados”, respondió Mourinho sobre sus diferencias con Wenger, entrenador del Arsenal, y también con el chileno Manuel Pellegrini, adiestrador del Manchester City.

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Pellegrini se tomó la revancha sobre Mourinho, al ganar el City 2-0. Al término del partido, el portugués reconoció el merecido triunfo de su rival, pero siguió con la controversia. “El segundo gol del City fue marcado en fuera de juego”, dijo.