El juez de línea ruso Musá Kadírov fue suspendido hoy de por vida por agredir a un jugador juvenil tras un partido entre el Térek Grozni y el Amkar, dictaminó hoy el comité disciplinario de la Unión de Fútbol de Rusia.

"Eso significa que Kadírov no puede ser no sólo árbitro, sino tampoco jugador, entrenador, agente, etc.", señala el fallo del comité recogido por las agencias locales.

Kadírov fue suspendido y recibió además una multa de 500.000 rublos (16.000 dólares) por "agredir a un futbolista poniendo en peligro su salud".

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Tras el pitido final del partido disputado el pasado 26 de abril Kadírov soltó el banderín, tiró al césped al defensa del Amkar, Iliá Krichmar, y comenzó a golpearlo con el puño y a propinarle patadas, según informan las agencias locales.

"El árbitro tardó en calmarse y gritaba que el jugador había insultado a su madre", informó Alexéi Spirin, inspector del partido que terminó con el resultado de 2-1 para el equipo chechén.

Krichmar, quien ha negado que hubiera falta al respeto al linier, también ha sido descalificado por cuatro partidos por su comportamiento violento.