‘Los Vivancos’, juntos por la sangre y el flamenco

Pedro Vivancos tuvo 39 hijos con distintas mujeres, pero el ser solo hermanos de padre no le quitó a ninguno la posibilidad de crecer en un ambiente circense, dancístico, acrobático y musical.

De la relación entre los 39 no se sabe mucho, pero sí de la que hay entre Elías, Judah, Josua, Cristo, Israel, Aarón y Josué, quienes a principios del 2006 decidieron formar la compañía española Los Vivancos que actuará en Ecuador.

La cita será este miércoles, a las 20:30, en el Teatro Nacional de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, en Quito. Brindará la segunda propuesta escénica con la que ha recorrido el mundo: Aeternum flamenco.

En una entrevista con este Diario, Elías Vivancos –el mayor de los siete– dio a conocer detalles sobre este show, cuyo montaje tardó 18 meses y que contó con la asesoría artística de Daniele Finzi Pasca, director y creador del Corteo (espectáculo itinerante) del Circo del Sol; y Julie Hamelin, cofundadora del Cirque Éloize. La producción musical es de Fernando Velázquez, compositor de la banda sonora de la película El orfanato y de la Orquesta Sinfónica de Budapest.

Las coreografías de Aeternum flamenco son un trabajo colectivo de la compañía. Elías destacó que esta producción “combina enorme virtuosismo con gran espectacularidad. Cuenta con acrobacias, ritmo electrizante, flamenco, una banda sonora de cine de acción. Es un espectáculo para los sentidos que se mete debajo de la piel del espectador”.

Los hermanos Vivancos viven arraigados a los escenarios, y la mayoría de veces, según comentó Elías, solo llegan a conocer los teatros de los países en los que se presentan.

Esta será la primera vez que arriben a tierras ecuatorianas, motivo por el cual quienes asistan podrán disfrutar de un show cuyo nombre representa “la inmortalidad que el arte brinda al hombre”.

“Es una oportunidad de escapar a lo efímero de nuestros cuerpos y rozar lo eterno a través del arte”, dijo el bailarín.

Música clásica, rock y flamenco son los componentes sonoros de esta pieza a cargo de Los Vivancos, compañía considerada como “el fenómeno musical escénico de esta nueva década”, según refiere su sitio web oficial.

Tal reconocimiento tal vez se atribuya al hecho de que desde su infancia, sus miembros lucharon y buscaron convertirse en los artistas integrales que son. Como uno de ellos afirmó en una entrevista con el Diario de Tarragona, en el 2009, desde niños soñaron con tener su propio circo, y como su destino ya estaba trazado, esa realidad terminó siendo no tan onírica como aparentaba.

En Canadá, su padre, quien es su mayor referente artístico, fundó la academia de artes Quantico Independent School donde les enseñó todo lo que sabía sobre danza, música, técnicas circenses, flamenco, artes marciales y gimnasia deportiva; elementos que –al igual que en Aeternum flamenco– se fusionaron en Siete hermanos, su anterior montaje que los llevó a recorrer 35 países.

Su preparación incluye estudios en el Netherlands Ballet Theatre y el Conservatorio Profesional de Danza Instituto del Teatro (Barcelona); y participaciones en la Junior Symphony Orchestra Of Amsterdam y prestigiosas producciones y compañías de danza, en EE.UU. y Europa, como la del bailarín Joaquín Cortés.

Espectáculo

Hay cinco localidades numeradas: butaca VIP $ 140, platea $ 110, luneta baja $ 90, luneta alta $ 70 y luneta alta MV $ 63,63.

Se encuentran a la venta en los locales de Musicalísimo de Quito, en almacenes Rickie (Av. 12 de Octubre) y en Scala Shopping en Cumbayá. En este último, a las 17:00, los hermanos Vivancos firmarán mañana autógrafos al público.