Convocados por el Ecuador, este lunes se reúnen en Guayaquil los países miembros del Pacto de San José para llegar a un consenso sobre las reformas al Sistema Interamericano de Derechos Humanos previo a la reunión de la OEA que se realizará el próximo 22 de marzo en Washington.

Daniela Salazar, exfuncionaria de la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ve como radicales las propuestas de reforma impulsadas por el gobierno de Rafael Correa y considera como un fracaso la gira que realizó el canciller Ricardo Patiño en busca de apoyo a las iniciativas de cambio, ya que la mayoría de países de la Organización de Estados Americanos (OEA) han aceptado con agrado los cambios que se comprometió hacer la CIDH en octubre pasado.

Cuestiona además que el Gobierno de Correa haya propuesto a un alto funcionario de la Procuraduría, Erick Roberts, como candidato para llenar una de las dos vacantes que tiene la CIDH y cuya elección se realizará en junio próximo.

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P. ¿Cuál es la expectativa de la cita de hoy de los miembros del Pacto
de San José, luego de que la semana pasada el Consejo Permanente de la
OEA mostró poco interés en las reformas al Sistema Interamericano de
DD.HH.?

R. Justamente porque las propuestas de Ecuador son más radicales de que las que se discuten en el Consejo es que se buscó la necesidad de hacer una reunión paralela para promocionar estas propuestas e ir más allá porque se da cuenta que a nivel de Consejo Permanente ya no tiene eco, por eso el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, se fue de gira y ahora convoca a esta reunión para buscar apoyo a su propuesta radical de reformar la Convención Interamericana de Derechos Humanos. Y esto se da porque en octubre del año pasado la Comisión emitió un documento aceptando una serie de recomendaciones, pero no las propuestas radicales de Ecuador y eso es lo que cambia todo porque los otros países han aceptado los compromisos de la CIDH.

P. ¿Qué aceptó la CIDH?
R. Lo más importante es que acepta reformar sus reglamentos y responde punto por punto al documento de la propuesta de reforma planteada. Respuesta que satisfizo a los estados miembros.

P. ¿Qué pasará si de esta reunión del Pacto de San José no salen consensos o si hay una decisión de reformas el Sistema Interamericano?
R. Desde que hubo la Asamblea en Cochabamba (Bolivia) el año pasado, los estados encargaron al Consejo Permanente discutir las reformas y llegar a una asamblea extraordinaria con una propuesta de esas recomendaciones que será el 22 de marzo. Todo este tiempo el Consejo venía discutiendo para tratar de llegar con un consenso hasta esa fecha y la reunión del jueves ya dio un panorama de lo que pasará, es decir que no hay apoyo para Ecuador. Ahora viene esta reunión paralela en Guayaquil que es la primera  de los estados parte de la Convención americana e invita a Venezuela, que el año pasado denunció a la Convención, y que  técnicamente ya  no es estado parte de la Convención Americana. No debería ni siquiera estar invitado. Otros estados como México, por ejemplo, que si va a venir a la reunión, ya dijo en un comunicado desmintiendo a Patiño que hay posiciones antagónicas a las de Ecuador. Colombia va a mandar a una delegación de bajo nivel no con capacidad de tomar decisiones fuertes. Costa Rica no apoya, igual que Brasil y otros.

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P. ¿Cuáles son los temas que propone Ecuador y que consideran radical estos países que ha mencionado?
R. Reformar la convención americana, reformar el estatuto, cambiar el financiamiento. Yo me atrevo a pensar que no van a lograr a nivel de la OEA (Consejo Permanente) lo que buscan. Ahí tendremos que ver que va a pasar con los votos de los países angloparlantes, por ejemplo el Caricom, que por lo general vota en bloque y son muchos, y su mayoría está de acuerdo con la propuesta de reformas de Ecuador.

P. El jueves en la reunión del Consejo voces como Costa Rica fueron de molestia y criticaron a Ecuador por impulsar las reformas y dijeron que analizarán si envían un misión para esta cita en Guayaquil.
R. Porque estas decisiones deberían tomarse en el seno de la OEA y con todos los estados parte y no en una cita de solo los miembros del Pacto de San José. Un poco lo que Ecuador quiere es sacar de la paleta a Estados Unidos con ese discurso antiimperialista y probablemente dado que no va encontrar en la OEA apoyo  para sus reformas tan radicales como quitarle la atribución a la Comisión de tratar casos y peticiones, la de dictar medidas cautelares, entre otras, lo que quiere es crear un sistema paralelo y lo ha dicho muchas veces.

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P. ¿El recorrido que hizo el canciller Patiño parece ser entonces que no fue efectivo?
R. Diría que no, pero no tenemos la suficiente información porque los únicos comunicados son del canciller Patiño que dicen que ha encontrado acuerdos y apertura en todas las embajadas, pero ya algunas le han desmentido ya sea con comunicados o a través de las posiciones públicas que han hecho en el Consejo Permanente. Mi percepción personal es que Ecuador no está logrando el apoyo que busca porque sus propuestas son muy radicales y es tan evidente que busca mermar un mecanismo de protección que está hecho para las víctimas y no para los estados, no está siendo bien comprendido por parte de Ecuador. Otros países como Argentina, que a diferencia de nosotros, vivió una dictadura con cientos de desaparecidos y sabe que la visita que hizo la Comisión  Interamericana en su momento fue determinante para que ese sistema caiga y la comunidad  internacional se entere de lo que estaba pasando; y que gracias a la Comisión  se ha logrado que esos casos vayan a juicio y los responsables sean sancionados.

P. El delegado de Nicaragua el jueves dio su apoyo a las reformas y en su discurso dijo que la Relatoria la Libertad de Expresión tiene tintes políticos e ideológicos. ¿Es así o los gobiernos como Ecuador la están volviendo política?
R. Es gracioso porque si se analiza el discurso de Nicaragua, Ecuador, Venezuela dicen que la Relatoria está con la derecha y aliada al imperio y otros países como Venezuela le culpan de ser de izquierda.
Siempre hay acusaciones de dos lados, pero la Comisión está ahí para proteger la violación a los DD.HH. y las violaciones ocurren en países con ideologías de derecha e izquierda y se pronuncia con respecto a los dos. No hay asidero. Igual se le acusa de estar parcializada a favor de Estados Unidos pero no es así. Si bien tiene la sede en ese país porque históricamente se firmó ahí el Pacto de San José, eso no significa que la CIDH no supervise a los Estados Unidos. Solo hay que revisar las estadísticas de medidas cautelares, visitas y audiencias para darnos cuenta que lo que dice el presidente Correa no es verdad.

P. Pero no podemos negar que la lentitud del trabajo de la Comisión sí ha sido una crítica que merece atención.

R. Por supuesto pero hay que ver quiénes son los responsables, y son los estados. Lo que pasa es que es un sistema perverso. Los estados crean este sistema y dicen supervisen, pero si no le dan el suficiente financiamiento no podrá de manera rápida resolver los casos. Si uno mira el número de denuncias que recibe cada año, que son como 1.500, tiene que pronunciarse de todas a parte de las que se van acumulando.
Esto no es cuestión presupuestaria, es cuestión de voluntad política de los estados.

P. ¿Cuáles son los recursos de que dispone la CIDH?

R. Del financiamiento total de la OEA en el 2012 el 6% se destinó a la Comisión. Es decir de 85 millones de dólares, el 6% fue  para la Comisión, es decir 4,8 millones, el resto se fue  a otros programas.
Y de ese presupuesto a la Comisión le alcanza para financiar la mitad de sus actividades al ritmo lento que ya tiene. Si la Comisión usara solo este fondo sin donaciones, que es la propuesta de Ecuador a mitad de año, la Comisión ya no estaría funcionando. Lo que ha hecho la Comisión es buscar financiamiento externo como una ONG y ha logrado donaciones que le permiten cumplir su mandato el resto del año.

P. ¿Cuánto dona Estados Unidos a la Comisión?
R. En el 2012 donó 1,3 millones. Y no solo Estados Unidos, hay otros como España, países de la Unión Europea...

P. El jueves también en el Consejo el delegado de Ecuador se sintió ofendido de que países le culpen de que proponga que todas las relatorias tengan el mismo presupuesto. Suavizó el discurso.
R. Lo que Ecuador dice y en papel suena bonito es que todas las relatorías deberían tener el mismo presupuesto, en la práctica significa que le tengo que bajar a la Relatoria de libertad de Expresión para que todas tengan el mismo presupuesto. ¿Por qué es importante la libertad de expresión? Porque a través de ese derecho se pueden garantizar otros derechos humanos. Si la gente no tiene libertad de expresión, ¿cómo denuncia las violaciones? No demos pasos para atrás.

P. ¿Sin Hugo Chávez en la cabeza de Venezuela y el Alba, podemos decir que estas iniciativas de Ecuador pierden fuerza?

R. Yo quisiera creer eso, habría que ver qué pasa con el nuevo gobierno de Venezuela. Y además no es solo Venezuela, Ecuador también ha liderado estos cambios para la Comisión. Ecuador no está solo en su intención de reformas.

P. ¿Qué es lo que más le molesta al gobierno de Rafael Correa de la
CIDH desde su punto de vista?
R.
Hay cosas en las que tiene razón y que la propia Comisión las ha identificado como desafíos del Sistema Interamericano que significa que la OEA tiene tres  niveles de protección para todos los estados miembros, algunos están supervisados por la corte interamericana y con base en la Convención Americana. Otros estados han ratificado la Convención, pero no le han dado la competencia a la Corte; en esos casos la Comisión supervisa e informa, pero no puede mandar los casos a la Corte. Y hay un tercer grupo de estados que ni siquiera son parte de la Convención y significa que la Comisión sí protege pero lo hace con base a la declaración de DD.HH.

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P. En este último grupo está Estados Unidos que es otro tema que Rafael Correa critica mucho.
R. Que Estados Unidos no firme es culpa de los propios estados que no le presionan. Tampoco le presionan a Venezuela que se salió del sistema. ¿Por qué Ecuador que critica tanto la universalidad del sistema no reclamó a Venezuela y le exigió que regrese y sea parte de todos los documentos que tanto le exige a Estados Unidos?. La comisión en universalidad se ha comprometido a hacer un informe.

P. ¿Otro tema es el de peticiones y casos?
R. Ecuador propone que la Comisión no debería tener facultad de recibir casos y peticiones, solo debería estar haciendo promoción de DD.HH.. A lo que los países del Consejo no lo apoyan.

P. ¿En medidas cautelares?
R. Ese es el tema que explotó a raíz del Diario El UNIVERSO que no le gustaron a este Gobierno, esto no es secreto. La posición es que la Comisión no tenga facultad de emitir medidas cautelares y solo lo haga la Corte. Los otros países mientras tanto piden que la Comisión sea más clara con sus criterios y la Comisión ya ha ofrecido dar detalles del porqué se emiten las medidas, informe con fundamentos y los estados están tranquilos con esto.

P. El gobierno ha propuesto a un alto funcionario de la Procuraduría para ser parte de la CIDH. ¿Un intento para politizar a la Comisión?
R. Son los estados que al momento de proponer sus candidatos para la CIDH (6 miembros) deben garantizar que sean miembros no políticos sino expertos en DDHH que vayan a contribuir con criterios técnicos, no amarrados políticamente desde este organismo. En este momento Ecuador ya propuso en la Comisión Interamericana para una de las vacantes, que se va a producir en diciembre de  este año y que se elegirá en junio, a Erick Roberts, un alto funcionario de la Procuraduría General del Estado, un funcionario que se ha estado dedicado a defender al estado ecuatoriano en los casos ante la CIDH. Sus funciones son completamente incompatibles. Un funcionario de la Procuraduría no podría ser parte de este organismo. Con esto se ve que el estado está tratando de llegar desde adentro quien sabe con qué intenciones.