AP
ASUNCIÓN, Paraguay.- Mientras el Senado paraguayo se preparaba este viernes para someter a juicio político al presidente Fernando Lugo por mal desempeño de sus funciones, el mandatario pidió a la Corte Suprema de Justicia la suspensión del proceso por supuestamente violar el principio jurídico de legítima defensa.

El abogado de Lugo, Adolfo Ferreiro, alegó ante la Corte que el tiempo de dos horas establecido para que Lugo se defienda de las acusaciones por mal desempeño de sus funciones es escaso.

Fabián Escobar, secretario administrativo de la sala constitucional de la Corte, confirmó que un asistente de Ferreiro hizo la presentación del escrito y explicó que esa sala puede aceptar estudiar el pedido de Lugo o rechazarlo sin más trámites porque el juicio en el Senado es político y no jurídico.

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Ferreiro explicó en conferencia de prensa que su presentación ante la Corte "no suspende el juicio político porque la sala constitucional no tiene fecha límite para expedirse. Lo puede hacer hoy o la semana próxima o cuando crea conveniente".

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Agregó que "de todos modos, si el Senado destituye hoy a Lugo recurriremos ante la Corte Interamericana con sede en Costa Rica porque afirmamos que el plazo de dos horas para defenderse es inconstitucional. El plazo normal para preparar la defensa en cualquier litigio judicial es de 18 días".

En tanto, el senador del Partido Liberal Radical Auténtico, Luis Wagner, disidente de la cúpula partidaria, anunció que "estoy tratando de reunir urgentemente al comité ejecutivo para anular la decisión del jueves de iniciarle un juicio político a Lugo, pidiéndole a los colegas que voten en contra de la destitución el viernes".

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"La destitución ocurrirá si el Senado obtiene dos tercios de los votos del total de sus 45 escaños, es decir 30 votos", especificó.

Lugo, quien fue elegido hace cuatro años gracias a sus promesas de ayudar a los pobres, apareció en televisión nacional para desmentir los rumores de que renunciaría y se comprometió a enfrentar el juicio con todas sus consecuencias.

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La cámara baja votó el jueves a favor de destituir al presidente. Horas más tarde, el Senado anunció que el mandatario, de 61 años y enfermo de cáncer linfático, sería enjuiciado el viernes en un proceso que se extenderá por cinco horas y tras las cuales habrá un veredicto.

El diputado opositor José López Chávez informó que los cargos contra Lugo serán numerosos e incluyen su responsabilidad en el enfrentamiento, su vínculo con líderes de organizaciones de campesinos que invaden haciendas privadas y nepotismo en la administración pública, entre otros.

Si el exobispo católico es destituido, el Partido Liberal Radical Auténtico, de la mano del vicepresidente Federico Franco, volverá a ocupar la presidencia del país luego de 76 años.

En Paraguay, un país pobre y sin acceso al mar, la votación llevó a los atemorizados residentes en la capital, Asunción, a cerrar los comercios y las escuelas. La incertidumbre puso en alerta al hospital de emergencias por si se presentan disturbios y brotes de violencia.

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Los paraguayos temen la posibilidad de que el enfrentamiento que se avecina en el Senado, bajo control de la oposición, pueda desatar violentas protestas callejeras como las que se produjeron en marzo de 1999 tras el asesinato del vicepresidente Luis María Argaña.

Legisladores de la oposición le pidieron a Lugo que renuncie para evitar la efervescencia política y los disturbios.

El exobispo católico, quien asumió el mando en agosto de 2008 y debe entregar el poder en agosto de 2013, afirmó la noche del jueves en entrevista con Telesur de Venezuela que "iré al Congreso con mis abogados a defenderme y espero que reine la racionalidad en los parlamentarios para que este presidente pudiese salir airoso del juicio injusto".

"Mi gobierno es aceptable por la mayoría", enfatizó.

Cancilleres de Unasur
El jefe de Estado recibió la noche del jueves el respaldo personal de los cancilleres de nueve países integrantes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). El venezolano Alí Rodríguez, secretario general de la organización, hizo de portavoz: "Dentro de la recta administración de justicia está el debido proceso con todas las garantías para que un acusado pudiese defenderse, eso queremos en esta ocasión. El viernes nos reuniremos con el Parlamento y partidos políticos para buscarle una salida no cruenta a la situación porque en casos así los hechos a desencadenarse son imprevisibles".

En tanto el presidente ecuatoriano Rafael Correa dijo, en rueda de prensa al volver de la cumbre de Brasil, que la Unasur podría "no reconocer al nuevo gobierno (paraguayo) e incluso llegar al cierre de fronteras como lo establece la cláusula democrática de Unasur. Internamente ellos pueden hacer lo que quieran, pero para ser reconocidos a nivel internacional depende de nuestra decisión".

Añadió que "ojalá entendamos la gravedad del asunto, esta época estaba siendo superada en América Latina".