De 400 conscriptos que tiene la Brigada Blindada Galápagos, 40 padecen de parotiditis (paperas) confirmada. Seis de ellos están hospitalizados porque tienen orquitis, una inflamación de los testículos como secuela de la enfermedad; otros 13 han sido dados de alta; 6 están en observación para prevenir problemas neurológicos, meningitis o encefalitis; el resto se recupera en el mismo cuartel.

Ese es el diagnóstico de Margarita Guevara, directora provincial de Salud de Chimborazo, al referirse al brote de paperas presentado en el cuartel riobambeño, donde los otros 360 conscriptos están aislados en el Centro de Instrucción de la brigada riobambeña.

La funcionaria advirtió que como parte del cerco epidemiológico formado alrededor de la brigada se implementó un seguimiento a las familias de los conscriptos infectados.

Publicidad

Guevara recordó que el contagio se dio porque un conscripto de la provincia de Bolívar era el portador del virus. Aclaró que se dotó de medicamentos sintomatológicos, al aclarar que si la persona presenta fiebre o dolor se le suministra antipiréticos o analgésicos, porque no hay medicación viral para el mal. “No es que no tenemos, sino que no se debe, no se debe dar ninguna otra medicación, sino lo sintomático, curar lo sintomático. Estamos dotados de todo, pronto se realizará una vacunación del tipo SRP (sarampión, rubéola y paperas). Esto está controlado”, señaló la directora de Salud.

La enfermedad es una inflamación, por virus, de las glándulas salivales parótidas. Los síntomas son: dolor facial, de cabeza o garganta, fiebre, inflamación de sienes o mandíbulas; en los varones puede haber inflamación testicular.

De los seis conscriptos que hasta ayer en la mañana permanecían en el área aislada del hospital militar de Riobamba, a William Naula le dieron el alta luego de que estuvo internado desde el jueves de la semana pasada. Él procede de la parroquia Juan de Velasco, del cantón Colta (Chimborazo).

Publicidad

Él explicó que el primer síntoma que tuvo fue dolor detrás del oído; luego se le hincharon las parótidas y le dijeron que eso era muy contagioso. Indicó que por esa razón lo aislaron mientras le suministraban medicamentos, pero que al tercer día se le hinchó el testículo derecho. “No aguantaba el dolor, mis compañeros pasaron la voz a mi subteniente Chacón para que me bajen acá el jueves en la noche, pero ahorita ya me dieron el alta”, refirió el conscripto de la leva 1994 (tiene 18 años).

El subdirector del hospital militar, coronel Marcelo Poma, afirmó que el brote se registró en el Centro de Instrucción, donde los conscriptos están ahora aislados, bajo un esquema de control, “pero como el periodo de incubación del virus va de 7 a 22 días no se podría identificar todavía si es que alguno de ellos está incubando”. Por esa razón incluso no se les da permiso para que salgan a sus casas ubicadas en diferentes ciudades del país.

Publicidad

“Como están en un solo centro de instrucción, ellos (los 400 conscriptos) son los potencialmente en riesgo”, dijo.

Aclaró que están en los dormitorios bajo cuidados y manejo médico, con medidas higiénicas adecuadas y uso en todo momento de mascarillas.