Con la promesa de erradicar la venta de material audiovisual falsificado y reemplazarlo por productos originales a bajos precios hasta mediados del próximo año, el presidente del Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual (IEPI), Andrés Ycaza, resalta la responsabilidad de los autores en mantenerse vigilantes del cumplimiento de sus derechos.

La Bahía de Guayaquil ha sido identificada como un “paraíso de la piratería”. ¿Cómo se llegó a este punto?
El principal error es no haber tomado las decisiones en los momentos oportunos. Eso es responsabilidad de las pasadas administraciones. Ahora, por ejemplo, iniciamos, de oficio (por cuenta del IEPI), 27 tutelas administrativas (inspecciones para constatar la violación de los derechos de autor), y haremos más.

¿Qué resultados tuvieron después de esas 27 tutelas?
Ninguno de los 27 locales, ubicados en avenidas principales de Guayaquil y Quito, tenía licencias para vender productos audiovisuales. Actuar ante estos grandes locales es ejemplificador para los pequeños comerciantes.

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Pero en la Bahía de Guayaquil las ventas siguen. ¿Por qué no ingresar al lugar donde nace este negocio ilegal?
No lo hicimos porque no estaba dentro del operativo, pero en algún momento lo vamos a hacer. Entrar a la Bahía de Guayaquil no es fácil, necesitamos más recursos y apoyo; pero estamos trabajando para que todos los vendedores de productos audiovisuales falsos reemplacen su mercadería con material original a bajo costo.

El IEPI aspira a reemplazar la venta de discos piratas por discos originales. ¿Cuándo?
A mediados del 2012, aproximadamente. Estamos en conversaciones con los distintos actores de la industria para conseguir que los discos originales se vendan en $ 3 o $ 4 y así erradicar la piratería.

¿Qué otras medidas tomarán para cumplir este propósito?
Seguiremos con las tutelas administrativas. Estamos promocionando la campaña Ecuador Crea para concienciar a la ciudadanía sobre los derechos de autor y haciendo un llamado a los creadores para que denuncien cuando sientan violentados sus derechos.