AP
MONTANA, EE.UU..- Los osos pardos de Yellowstone van a estar particularmente hambrientos en el último trimestre del año, pues los científicos han informado que uno de sus alimentos favoritos, los conos de pino de corteza blanca, escasea.
Esto significa más encuentros peligrosos con los humanos, en un año que ya es el más mortífero por los ataques de estos plantígrados en el área. El largo invierno está cerca, y los osos se preparan para ganar unas libras que les ayuden a sobrellevar el frío que se aproxima, pero a falta de su alimento, han empezado a buscar otra fuente de proteínas, la carne.
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Los administradores de la vida silvestre del parque informaron el domingo pasado que los osos están bajando de las montañas a zonas frecuentadas por cazadores, recolectores de frutos y excursionistas.
El experto en osos pardos de la Encuesta Geológica de Estados Unidos dijo que quienes transiten por el lugar deben estar prevenidos para un posible ataque.
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En lo que va del año, dos personas fueron mutiladas por osos pardos en Wyoming y Montana.
Los expertos dicen que es el mayor número de tragedias en un año en al menos un siglo para la región de Yellowstone. En ambos casos los osos fueron sacrificados.
En el último ataque, un hombre de Michigan murió y dos resultaron heridos cuando un oso desnutrido y sus tres cachorros merodeaban en un campamento lleno de gente cerca de Cooke City, Montana.
Los osos pardos adultos de Yellowstone pueden llegar a medir 1,80 metros de estatura y pesar 272 kilos.