La cantante ecuatoriana Paulina Aguirre se alzó ayer con uno de los primeros gramófonos de los premios Grammy Latinos, cuya gala de su décima edición tuvo lugar en  el Hotel-Casino Mandalay de Las Vegas (EE.UU.).

Aguirre obtuvo el galardón en la categoría Mejor Álbum Cristiano (en español) por la producción discográfica Esperando tu voz. En este mismo apartado, pero en idioma portugués, ganó la agrupación brasileña Oficina G3, por su disco Depois da guerra.

Al recibir el Grammy por un trabajo que incluye un dueto con el mexicano Armando Manzanero, la ecuatoriana (primera en obtener ese reconocimiento) comentó que el galardón de alguna manera “eleva la identidad de mi país a otro nivel y se lo dedico especialmente”.

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En el 2007, la cantante nacional también estuvo postulada a los Grammy Latinos. Entonces fue como debutante y con el disco Mujer de fe. La artista, quien reside en Estados Unidos, volvió este año con una producción lograda bajo el sello Mucho Fruto, fundado por  su esposo, el guayaquileño Pablo Aguirre.

A inicios de octubre pasado, en una entrevista con este Diario, la artista dijo estar agradecida con Dios por constar por segunda ocasión entre los candidatos al reconocimiento internacional.

“Es una tremenda bendición”, comentó.