En estos tiempos, ni en tierra ni en mar, se puede estar a salvo de los robos.

La comunidad pesquera de Puerto López y de toda la zona costera se encuentra en zozobra por el repunte de la delincuencia hacia nuestra milenaria actividad pesquera. Delincuentes llamados “piratas” vienen robando nuestras artes de pesca, motores, tanques de gasolina, embarcaciones, productos de mar, y hasta la vida misma.

La gente que ha dedicado su vida a laborar en la pesca no encuentra en qué oficio ocuparse en tierra firme, ya que el único trabajo que conocen no lo pueden desarrollar en paz porque cuando salen a pescar, “piratas del mar” están esperándolos para cazarlos y a punta de balazos detenerlos si tratan de huir; y dejarlos después abandonados a la deriva sin agua, sin alimentos, porque les roban todo.

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Por su parte, el pueblo entero está sumido en la inestabilidad económica por la crisis general, ya que actualmente estamos en temporada baja de turismo, y nuestra otra fuente de ingreso es la pesca, pero está amenazada por la delincuencia. Por ello, rogamos que tomen medidas urgentes las autoridades encargadas, para que nos ayuden lo más pronto posible. ¡Por favor, implementen resguardos en toda la franja costera, por el bien de la comunidad pesquera ecuatoriana! Los asaltos no son pura “percepción”.
Los robos, asaltos, etcétera, lo viven a diario nuestros pescadores.

Petita Ponce Morán,
Puerto López, Manabí