En el sector de la Junta de Riego América Lomas, los arroceros están a la expectativa del rumbo que pueda tomar la  comercialización de la gramínea una vez que crezca la oferta del producto en el sector a comienzos del 2009.

Diógenes Ruiz, quien busca la presidencia de esta agrupación en las elecciones convocadas para enero próximo, manifestó que en esta zona, donde fluye el arroz permanentemente, ven las piladoras abarrotadas, poco circulante y cierta tendencia a que decaiga el precio.

“Mantener la decisión de impedir la salida del producto a Colombia nos está perjudicando por ser nuestro mercado más cercano y el que consume la mayor cantidad de excedentes. Si no tenemos esa salida, a quién vamos a vender,  nos vamos a ahogar”, expresó.

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Acerca de los silos del Estado, precisó que pocas veces les han servido, y catalogó como relativas las ayudas oficiales, porque  son pocos los que se han beneficiado de los fertilizantes, en parte por la viveza criolla. “Tenemos conocimiento de que había gente vendiendo tiquetes, no importaba si era dos o tres veces a la misma persona. A la gente se le ha obligado a pagar dentro de la Junta valores extraordinarios para que les vendan los insumos.
Una sana intención del Gobierno que llegó muy poco”, puntualizó.

El binomio de Ruiz, Felipe Escobar, comentó que aspiran a rescatar la razón por la cual se  creó la Junta de Riego: prestar el servicio de agua a los cientos de usuarios y hacer más función social.

Por ahora el precio interno ha subido un dólar ($ 32 saca en cáscara de 200 lb), y el Gobierno tiene almacenados 620.000 qq de arroz pilado G2.