Un taller donde se confeccionaban juegos pirotécnicos (castillos, vacas locas, trenes, venados, aviones, entre otros fuegos), pero no camaretas, quedó en escombros el pasado lunes luego de una explosión  en la parroquia  Cubijíes, a cinco kilómetros de Riobamba.

La familia Vizuete, dueña del negocio, perdió una inversión que asciende a 5 mil dólares.

Sin embargo, aseguró tener todos los documentos en regla e incluso la semana pasada la Intendencia, conjuntamente con  las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y del Cuerpo de Bomberos, realizó una inspección al establecimiento.

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“Todo el material estaba separado adecuadamente y clasificado. El producto estaba listo para entregar esta semana”, se lamentó el propietario.

Testigos afirmaron que vieron a dos sujetos salir del taller donde se produjo la explosión pocos minutos antes de que ocurra el siniestro y  que cuando los dueños del negocio  intentaron apagar las llamas, era demasiado tarde; solo pudieron observar cómo su inversión se redujo a cenizas.

Roberto Sánchez, jefe del Cuerpo de Bomberos de Riobamba, indicó que serán las investigaciones las que establecerán si fue un atentado o se trató de negligencia laboral.

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Por otra parte, Luis Carvajal, intendente general de Policía de Chimborazo, recordó que hace un año ocurrió algo similar. “No solo hubo daños materiales, sino víctimas que sufrieron quemaduras hasta de tercer grado en sus cuerpos, incluso perdieron parte de sus extremidades y hasta la vida”, dijo.

Carvajal añadió que se tomarán medidas radicales a fin de prevenir percances similares en el futuro, pues —dijo— “existen personas que no comprenden que nuestro trabajo es precautelar la vida y seguridad”.

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DETALLES: Juegos pirotécnicos

Operativos
El Cuerpo de Bomberos de Riobamba, y la Policía incautaron ayer juegos pirotécnicos que eran vendidos a menores de edad en los mercados Santa Rosa, La Merced y San Alfonso. “Se decomisaron planchas de diablillos y 50 cajas de sonajeros”, dijo el intendente Luis Carvajal.