El accidente se produjo esta mañana a unos 8 kilómetros de las costas de Corea del Sur, cuando el buque petrolero hongkonés, Hebei Sprit (de 146.000 toneladas), chocó contra un carguero surcoreano.

El accidente se produjo en el Mar Amarillo, cuando el "Hebei Spirit" se dirigía hacia el puerto de Daesan para descargar su carga. El petrolero estaba anclado cerca de la costa de Mallipo (a unos 90 km al sudoeste de Seúl) cuando fue chocado por la barcaza de 11.800 toneladas.
  
En esos momentos, la barcaza, que transportaba una grúa, era remolcada por un barco.
  
"Los primeros elementos de nuestra investigación señalan que cuerdas  demasiado flojas amarradas al barco remolcador podrían haber ocasionado el accidente", dijo Kim.
  
Según la agencia surcoreana Yonhap, las cuerdas que unían a las dos embarcaciones se rompieron debido a vientos violentos y al oleaje.

Publicidad

La cantidad de crudo vertida es superior al peor accidente de este carácter ocurrido hasta ahora en Corea del Sur, sucedido en 1995, cuando se vertieron unas 5.000 toneladas.

El Gobierno surcoreano ha creado un centro para paliar los daños producidos y ha enviado al lugar del accidente tres barcos de limpieza que trabajan en la zona del accidente.

Publicidad

El ministro de Pesca, Kang Moo-hyun, dijo que las autoridades trabajan para detener el vertido antes de que se extienda a los centros pesqueros cercanos a la zona del accidente.

Según Yonhap, algunos habitantes de la zona más cercana al accidente presentaron síntomas como náuseas, a causa del olor del petróleo.
Los pescadores expresaron su preocupación por si el vertido se extiende por las zonas pesqueras.

Marea negra amenaza catástrofe ecológica

Las autoridades de Corea del Sur temían este viernes un desastre ecológico de gran magnitud tras el vertido de más de 10.000 toneladas de crudo a causa de un choque entre un petrolero y una barcaza frente  a la costa occidental del país.
  
"Es la peor marea negra de la historia del país. Nosotros tememos una catástrofe ecológica", declaró Kim Jong-Sik, un funcionario del  ministerio de Asuntos Marítimos y Pesca.
  
"Hemos colocado boyas tratando de evitar que el petróleo se extienda a la costa, pero a veces se derrama, depende de las corrientes", agregó, mientras  una flota de 28 barcos diseminaba productos químicos disolventes o trataba de  bombear la mancha de hidrocarburos.

El "Hebei Spirit", un tanquero de bandera honkonguesa, ya derramó más de 10.000 toneladas de petróleo crudo de las 15.000 toneladas que transportaba, precisó este responsable.
  
"Hemos colocado boyas para impedir que el petróleo se expanda a las zonas  costeras", agregó Kim.
  
Las autoridades ordenaron la creación de una célula de crisis y enviaron unos 40 guardacostas, varias embarcaciones y cuatro helicópteros.
  
No obstante, las operaciones de bombeo son lentas debido al mal tiempo y al riesgo de explosión del tanquero.
  
Los barcos que se encuentran en las inmediaciones fueron llamados para que colaboren en el rescate, según el ministerio de Asuntos Marítimos.
   
"El petróleo sigue escapándose de tres agujeros a babor del petrolero. Una  capa de petróleo se extiende a lo largo de 5 km y amenaza a la aquacultura de la región", advirtió Kim.
  
"Si no logramos contener la mancha de petróleo, tememos que provoque serios daños en las costas", explicó.