El nuevo ministro de Economía, Diego Borja, recibirá el 2006 con la expectativa de captar unos  $ 500 millones en la Cuenta Especial de Reactivación Productiva y Social (Cereps), que desde julio pasado reemplazó al Feirep por iniciativa de este Gobierno.

La Tesorería de la Nación informó que la Cereps registró ingresos por $ 643,4 millones y gastos por $ 290,3 millones. El saldo –que pasará a otra cuenta denominada Fondo de Ahorro y Contingencias (FAC)– suma  $ 353,1 millones.

El monto que el Gobierno espera acumular el próximo año es similar. La proyección es de entre $ 500 y $ 600 millones. Las exigencias, sin embargo, no son las mismas.

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Las elecciones de octubre próximo y el proselitismo preliminar marcarán buena parte del gasto público, dice el Observatorio de la Política Fiscal.

Diego Borja, antes de asumir el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), mientras ocupó la presidencia de la Asociación de Productores y Exportadores de Flores (Expoflores), fue uno de los principales dirigentes empresariales que reclamó la entrega de recursos para crédito productivo.

Ahora, en calidad de ministro, antes de aprobar las asignaciones, Borja deberá revisar los planes operativos, que en el 2005 no se ejecutaron en su totalidad y que serán canalizados por el Banco Nacional de Fomento (BNF) y la Corporación Financiera Nacional (CFN).

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Según la Presidencia de la República, en este año “se utilizaron $ 159 millones para la reactivación  productiva, social y tecnológica”.

El desglose muestra, principalmente, que el área de salud recibió $ 38 millones; educación, $ 47,9 millones; ciencia y tecnología, $ 8,1 millones; saneamiento ambiental, $ 17,9 millones; reparación ambiental y social, $ 5,7 millones; mantenimiento vial, $ 31,4 millones, y para reactivación productiva se destinaron $ 10 millones.

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Los recursos quedaron comprometidos, por ejemplo, para proyectos de infraestructura educativa y hospitalaria.

Pendientes
El próximo año la lista de proyectos por ser beneficiados aún está vacía. El nuevo Ministro solo cuenta la distribución en porcentajes que la Ley determina.

El reparto de la Cuenta –junto a las definiciones de cómo se utilizarán los recursos de la última colocación de bonos– está entre las prioridades del Gobierno para el 2006.

Analistas económicos, como Gustavo Arteta o Jaime Carrera, advierten que un uso político de la Cereps podría perjudicar los planes de recompra de deuda y, por tanto, iniciar un periodo de desconfianza de los acreedores, organismos multilaterales, calificadoras de riesgo y agentes de mercado.

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Borja insistió ayer en su independencia política y negó cualquier condicionamiento de los partidos tradicionales. “Yo me debo al país”, dijo.

Colaboradores del nuevo Ministro afirmaron que las autoridades económicas presentarán la próxima semana su plan de trabajo oficial.

Reacciones

SIN DIRECCIÓN
Mauricio Pinto, presidente de la Federación Nacional de Cámaras de Industrias, comentó ayer que  “hemos recibido con preocupación y tristeza la noticia de la salida de la ministra Magdalena Barreiro, del Ministerio de Economía”.

Agregó que el cambio de ministros refleja que el Gobierno no quiere poner la economía en orden. Evidentemente está claro, precisó, que la Ministra sale por presiones de gasto y para que el régimen pueda disponer del dinero que tiene que ser invertido en canje de deuda por deuda más cara. “No hay una dirección clara para la economía”, manifestó.

PROYECTOS
“El Ministerio de Economía debe ser manejado por una persona que conozca tanto los factores de producción y la realidad de la economía nacional”, dijo José Vergara, presidente del Colegio de Economistas de Pichincha, quien sugirió que Diego Borja “se deje asesorar por los colegios de profesionales”. Respecto del financiamiento, Vergara considera que el nuevo Ministro de Economía debe tomar medidas drásticas para cobrar impuestos y tomar en cuenta proyectos como el presentado por el Colegio. Este es el proyecto de ley de impuestos a las ganancias ocasionales de las compañías petroleras transnacionales, que tiene por objeto cobrar impuestos sobre la rentabilidad.

RECURSOS
Más que cambio de nombres, para Jaime Carrera es necesario que el Gobierno tenga una política austera y reduzca el gasto en el 2006. El nuevo Ministro de Economía –dijo Carrera– deberá dejar unas cuentas públicas en orden para el próximo Gobierno.
Para ello,  Carrera, quien es  secretario del Observatorio de la Política Fiscal, considera prioritario equilibrar el presupuesto y dedicar el próximo año a  las labores de canje y compra de deuda con los recursos que hay disponibles. 
 
EXPECTATIVAS
Teodoro Maldonado, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Guayaquil, comentó que el nombramiento de Diego Borja es acertado. “Es un profesional que conoce del tema y esperemos que sepa resolver los problemas”, dijo. Considera que el principal reto debe ser el control al gasto público, que se disparó en más de $ 1.220 millones entre el 2005 y 2006.

Maldonado insistió en que “lo que necesita el sector productivo es estabilidad política; eso es básico”. Las nuevas inversiones, indicó, dependerán en buena medida de la gestión del Gobierno en el año que le queda en el poder.

La Cámara de Comercio de Guayaquil, según Maldonado, insistirá ante Borja para que lleve a cabo el proyecto de IVA Cobrado, IVA Pagado, que el equipo de la ex ministra Magdalena Barreiro postergó por considerar que eso implicaría una reducción de ingresos al fisco.

Ese proyecto implica el diferimiento del pago del Impuesto al Valor Agregado (IVA)  en las compras a crédito. El Servicio de Rentas Internas (SRI) también se opone a esa iniciativa que según la Cámara de Comercio facilitará el comercio en el Ecuador.