Los pantalones y camisetas que lucieron en Nochebuena  los dos hijos de Carlos Zamora fueron nuevos, pero se compraron con dinero prestado, porque los 83,40 dólares de fondos de reserva de este empleado de un casino no llegaron a sus manos.

Hace dos meses y medio empezó el trámite para que le pagaran el dinero. Ha ido seis veces  a la Caja del Seguro –matriz del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en Guayaquil– para que le expliquen por qué demoran tanto en darle su cheque.

Por tener menos de cien dólares pudo cobrar en Servipagos, pero prefirió registrarse en el IESS para que le dieran un cheque.

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Dos meses esperó para que le desbloquearan su cuenta de fondos de reserva y pudiera solicitar el dinero en el Seguro, donde le dieron un comprobante para que volviera el  18 de diciembre pasado por su cheque; pero no estuvo listo ese día. Cinco días después regresó a la agencia sur del IESS (donde se entregan los cheques) y tampoco estaba listo.
Le dijeron que esperara hasta esta semana, por lo que pensó que cobraría antes que terminara el 2005. Se equivocó. Hasta ayer no constaba en la lista de beneficiarios.

El jefe de la agencia sur del IESS, Néstor Torres, revisó ayer su computador y verificó que el  cheque de Zamora ya se emitió el 28 de diciembre, pero aún no llega a esa oficina, por lo que estima que el pago se hará el 2 de enero.

Zamora pasará el fin de año sin su fondo de reserva, al igual que decenas de  afiliados que siguen reclamando su dinero en las oficinas del Seguro. Hay muchos más que aún no pueden cobrar   hace tres meses, cuando se inició la devolución. El número de impagos no está cuantificado, según el director provincial del IESS, Gregory Gines.