Analistas: Se debe aclarar incursión militar

El ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, dio un giro en su posición respecto de las consecuencias del Plan Colombia en territorio ecuatoriano.

A menos de dos meses (11 de noviembre) de la incursión de helicópteros y militares del Ejército de Colombia en Mataje (Esmeraldas), otro incidente similar se produjo el 25 de diciembre pasado en el poblado de Frailejón, a 25 kilómetros de Tulcán.

Efectivos colombianos se enfrentaron con insurgentes del Frente 48 de las FARC, en territorio ecuatoriano.

A diferencia del primer incidente, y que ocasionó el desplazamiento de más de 500 colombianos hacia Ecuador,  Jarrín justificó el miércoles la última incursión aduciendo que se produjo durante una persecución de fuerzas irregulares “en caliente”.

Ese hecho, indicó el presidente del Observatorio del Plan Colombia, René Vargas, reflejó que Jarrín, “está equivocado en su apreciación, al calificar a la incursión como un sobrepasamiento”.

La captura en Quito de Simón Trinidad, uno de los líderes de las FARC, indicó, demuestra que la Policía colombiana está actuando en esta ciudad y las violaciones a nuestra soberanía se repiten.

Mientras en noviembre, Jarrín, junto con el entonces jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Manuel Zapater, visitaron el sitio de la incursión y elaboraron un informe que fue enviado el 16 de noviembre al Ministerio de Defensa de Colombia, el incidente en Carchi fue reconocido abiertamente y hasta el momento no se solicita una explicación al vecino país.

En la primera ocasión, Zapater instó a sus similares colombianos a respetar las cartillas de seguridad utilizadas por los dos ejércitos, y Jarrín amenazó a Colombia si sus militares cruzan el límite político con Ecuador.

Ese pronunciamiento coincidió con el escándalo desatado al interior de las FF.AA. tras la muerte del notario de Machala, José Cabrera.

Ambos discursos, sin embargo, fueron neutralizados en la práctica tras la visita a Quito del vicecanciller de ese país, Camilo Reyes, el 17 de noviembre, y la reunión de los ministros, Carolina Barco, y Francisco Carrión, el 7 de diciembre pasado.

Tras la cita diplomática, las dos autoridades suscribieron un comunicado en el que se  establece el compromiso de garantizar la seguridad en la frontera común bajo el respeto a la soberanía de cada estado, así como el cumplimiento de las decisiones adoptadas por la Comisión Binacional de Frontera (Combifron), cuya próxima cita será en abril del 2006.

Alexei Páez, de la Flacso afirmó que Jarrín al calificar al incidente del fin de semana como un sobrepasamiento utilizó un calificativo, pero lo que hubo en realidad fue una “intervención de grupos armados en territorio ecuatoriano”. “Creo que el ministro Jarrín está tratando de mantener ese perfil de no confrontar al Estado colombiano, debido al reciente acercamiento con el Ecuador”, expresó.

La Cancillería ecuatoriana anunció ayer en un comunicado que propuso a la embajada de Colombia en esta ciudad, que la reunión de ministros de Defensa de ambos países, se realice el próximo 12 de enero, aunque no especificó el lugar.