Uno de los clubes más antiguos del fútbol argentino le propondrá a Diego Maradona su regreso a las canchas, a los 45 años y con su físico minado por diversos problemas de salud.
    
Lo queremos aunque juegue parado; al menos para que patee los penales o los tiros libres, dijo el presidente de Excursionistas Armando Mainoli.
    
Esto es un sueño, pero es ciento por ciento serio y no es una locura, agregó Mainoli a la prensa en la noche del lunes.
  
Excursionistas fue fundado hace 96 años, tiene su sede en el barrio de Belgrano, en esta capital, y participa del torneo de primera C, que está cuatro escalones abajo de la división mayor, donde entre otros participan Boca Juniors y River Plate.
  
El interés de los albiverdes está fundado en recientes declaraciones del propio Maradona, quien dijo que me gustaría jugar en un club de la C o la D, ya que ahí no existe la presión superprofesional de la primera división.
  
En los años 80, en Excursionistas llegó a jugar el endiablado delantero René Housemann, campeón con Argentina en el mundial que se disputó en 1978 en ese país.
  
Maradona, capitán del seleccionado argentino que en 1986 se consagró campeón mundial por segunda vez, en este caso en México, no formuló declaraciones sobre el interés de Excursionistas.
  
El campeonato de la primera C arranca el 4 de febrero.
  
Después de haber estado en 1994 al borde de la muerte por problemas cardíacos y pulmonares derivados de su por entonces adicción a las drogas, Maradona se mostró este año recuperado: se sometió a una operación en el estómago que le hizo perder casi 50 kilos de peso y según suele decir, hace más de un año y medio que no consume sustancias prohibidas.
  
Durante los últimos meses del año, Maradona se convirtió en un exitoso conductor de la televisión y en asesor futbolistico de Boca Juniors, flamante campeón del fútbol nacional y de la Copa Sudamericana.
  
Se retiró del fútbol a mediados de 1997, pero de vez en cuando despunta el vicio, como lo hizo la semana pasada en dos amistosos --uno en Brasil y otro en la Argentina-- en la cuales mostró que su zurda conserva pinceladas de calidad.