La Unión Europea (UE) condenó el martes las  continuas violaciones de los derechos humanos en Irán, un día antes de la  reunión entre iraníes y europeos sobre el dossier nuclear de la República  Islámica.

En un documento publicado por la presidencia británica, los 25 miembros de  la UE dicen que el respeto por los derechos humanos y por las libertades  fundamentales es una condición esencial para que las relaciones entre la UE e  Irán mejoren.

"La UE está profundamente preocupada de que el estado de los derechos  humanos en Irán no haya mejorado de forma significativa en los últimos años,  sino que en algunos aspectos empeoró", se lee en el comunicado.

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La UE condena particularmente el uso de la pena de muerte y las ejecuciones  públicas.

Las críticas también han ido dirigidas al recorte de la libertad de  expresión en la República Islámica.

El lunes el presidente ultraconservador iraní, Mahmud Ahmadinejad, ordenó a  la televisión y a la radio que no difundan la música occidental y decadente,  mientras que el ministro de cultura, Mohammad-Hossein Saffar-Harandi, estimó  que "las películas insultantes para la religión y la cultura del pueblo (...) y  las películas decadentes y estúpidas" debían ser prohibidas.

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La "UE reconoce los esfuerzos limitados por las autoridades de Irán para  mejorar la Justicia, pero se muestra preocupada por la falta de acciones  efectivas para reformar las leyes, las instituciones y las prácticas oficiales  que permiten que se violen los derechos humanos", añade el boletín de la  Unión.

La Unión Europea inició sus conversaciones con Irán sobre los derechos  humanos en 2002. Después de 2004 Teherán se negó a proseguir estas reuniones.

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"La UE sigue dispuesta a discutir sobre derechos humanos" con Irán, agrega  el comunicado.

Irán y la UE se reunirán el miércoles en Viena para intentar salir del  punto muerto en que se encuentran las negociaciones sobre el dossier nuclear  iraní.

Teherán insiste en que tiene derecho a producir combustible nuclear, lo que  Estados Unidos y la UE dicen que puede ser utilizado para realizar bombas  atómicas, por lo que exigen a Irán que ofrezca garantías concretas de que no  está desarrollando un programa militar.

Si el miércoles las negociaciones desembocan en un fracaso total,  probablemente sería un incentivo para que europeos y norteamericano envíen el  caso ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que podría imponer sanciones a  Teherán.

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