El argentino Boca Juniors se adjudicó anoche por  segundo año consecutivo la Copa Sudamericana de fútbol al imponerse 4-3 por  penales (1-1 en tiempo regular) al mexicano Pumas de la UNAM, en el desquite de la final, que se jugó en el estadio La Bombonera, en  Buenos Aires.

El delantero Martín Palermo (31 minutos) marcó el gol de Boca, mientras que  el atacante Bruno Marioni (54, penal) igualó para Pumas, por lo que fue  necesaria la definición por penales, ya que en el encuentro de ida, en Ciudad  de México, también habían igualado 1-1.

De este modo, Boca coronó una semana de ensueño al celebrar dos conquistas  en apenas cinco días, ya que el miércoles pasado se había adueñado del Torneo  Apertura-2005 de la primera división del fútbol argentino.

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Con este triunfo, Boca llegó a los 15 trofeos internacionales e igualó la  línea de los equipos más ganadores en el plano exterior, que comparte con el  argentino Independiente, el español Real Madrid y el italiano AC Milán.

En el tiempo regular, Boca ejerció el dominio y mereció quedarse con el  triunfo, pero Pumas rescató un empate con un penal controvertido, y en la  definición desde los once metros, el arquero de Boca, Roberto Abbondanzieri, se  lució al atajar dos remates y convertir el último.