Una variedad de datos en nueva cédula

Un convenio le permite al Cabildo porteño asumir todos los servicios del actual Registro Civil, crear una nueva cédula y fijar nuevas tarifas. Los trabajadores del Registro analizan la posibilidad de presentar una demanda de inconstitucionalidad contra el acuerdo.

Como una tarjeta de crédito, con similar material, con la tecnología de un chip inteligente cargado de datos del usuario y con dispositivos de seguridad. Así será la nueva cédula que planifica entregar el Municipio de la ciudad, desde julio del 2006. Y con eso, impedir que existan falsificaciones o suplantaciones.

El uso de este documento, empero, no será obligatorio, según voceros municipales.

La cédula de los guayaquileños, desde julio del 2006, tendrá el formato y el mismo material de una tarjeta de crédito, con la tecnología de un chip inteligente y con dispositivos de seguridad que impedirán falsificaciones o suplantaciones.

Según el convenio de Transferencia de Competencias del Registro Civil al Municipio de Guayaquil, vigente desde el 24 de noviembre pasado, el Cabildo asume definitivamente el control de la entidad y tiene potestad para emitir el nuevo documento que lo entregará en dos nuevos edificios y oficinas y con equipos de última tecnología como un tablero electrónico donde se pondrá su firma, y un escáner digitalizado para las huellas.

“El clamor de las mayorías es que  el Registro Civil deje de ser un suplicio y se convierta en un servicio”, dice el alcalde Jaime Nebot al explicar  por qué pidió el control de la dependencia de cedulación.

No obstante, la firma del convenio ha provocado incertidumbre en algunos usuarios que  en estos días han acudido al Registro, ubicado en la avenida Veinticinco de Julio, y rechazo en los empleados de la institución. Los primeros temen que se obligue a cambiar la cédula, que suban los costos o que sus datos sean usados libremente, mientras que los segundos aducen que ya no tendrían a quién atender sino “rascarse las costillas”, como dice un empleado.

El convenio, dice Henry Cucalón, secretario municipal, aclara que, aunque el Cabildo no absorba al personal de la entidad, esta no se eliminará.

“El Registro Civil seguirá atendiendo, pero no a los guayaquileños sino a usuarios de otros cantones”, dice y  ratifica que no se obligará a cambiar la actual cédula y que los costos de los trámites y servicios  se fijarán sin ocasionar impacto económico en los usuarios. Nebot no especifica el valor, pero asegura que costará menos en cuanto al tiempo y al día de trabajo que toma sacar una cédula actualmente.