Las autoridades iraníes ponen en la cuerda floja la reanudación de las negociaciones sobre la cuestión nuclear con Europa "debido a sus declaraciones y a las condiciones que exigen", declaró este miércoles el ministerio de Relaciones Exteriores en París.
  
"Con sus declaraciones y con las condiciones que exigen, las autoridades iraníes se arriesgan a poner en peligro la posibilidad de encontrar una base que permita reanudar las negociaciones", declaró el portavoz de la Cancillería.
  
El responsable iraní Ali Larijani, encargado de las negociaciones sobre la cuestión nuclear, repitió el lunes que Teherán no renunciará a su objetivo de producir combustible nuclear, rechazando así una propuesta sobre producción de uranio fuera del país.
  
"Lamentamos las recientes declaraciones de Larijani insinuando que Irán podría reanudar rápidamente las actividades de sus centrifugadoras", declaró el portavoz francés.
  
"Estas actividades serían contrarias a las reiteradas demandas del Consejo  de gobernadores y a las resoluciones de la Agencia Internacional de la Energía  Atómica (AIEA)", subrayó.
  
Según la Cancillería francesa, Europa ha dado muestras de "apertura y ha  subrayado que estaba dispuesta a encontrarse de nuevo con los responsables  iraníes para analizar la reanudación de las discusiones, según las propuestas  realizadas desde el mes de agosto y después de las ideas dadas por Rusia".
  
Moscú propuso a Irán que reanudara el enriquecimiento de su uranio en Rusia, según fuentes diplomáticas.
  
Según el ministro francés de Relaciones Exteriores, Philippe Douste-Blazy, "cada vez que se hace una propuesta, la respuesta iraní es siempre negativa".
  
Francia, Gran Bretaña y Alemania confían en convencer a Irán de renunciar a la producción de combustible nuclear para evitar que su programa derive en la construcción del arma atómica.