Se exhumó cuerpo de Cabrera

Una vez abierta la tumba del ex notario de Machala persistió la duda de que sea él quien está ahí.

Un centenar de personas que se dice perjudicada por el ex notario José Cabrera Román asistió ayer a la exhumación de quien se dice que no está muerto, que es otra persona la que está en la tumba.

En medio de empujones, algunas personas gritaban “sáquenle la máscara”; otras decían: “no es él”, “es muy pequeño para que sea el doctor”, “está intacto y ya debería estar descompuesto”. Era como un desahogo de rabia y morbo a la vez.

La exhumación de Cabrera, fallecido en Quito el 25 de octubre pasado, fue dispuesta por el fiscal Dalton Macas a pedido de un grupo de 200 demandantes patrocinados por Harry Álvarez y que entregaron miles de dólares a Cabrera y por los cuales él les pagaba del 7 al 10% mensual de interés.

La diligencia duró casi tres horas. Cuatro empleados del cementerio Parque de la Paz, ubicado al sureste de Machala, y una minirretroexcavadora extrajeron el ataúd color café, que estaba semidestapado (el 14 de noviembre pasado decenas de personas profanaron la tumba), de la fosa.

El cuerpo vestía un terno negro y sobre el pecho descansaba un crucifijo de madera. Solo ello acompañó hasta la tumba a aquel hombre influyente que manejó millones de dólares de unas 30 mil personas del país, entre ellas políticos, jueces, militares y policías.

Ayer el fiscal Macas dirigió el proceso mientras trataba de poner orden en el sitio. Discutió a ratos con un grupo de mujeres que lo empujaba para mirar de cerca el rostro del cadáver.

Adela Zambrano Villacrés, odontóloga de la clínica Dental Plus, llegó citada por Macas para analizar la dentadura del extinto notario. “Esa pieza dentaria la hice yo y la coloqué al notario Cabrera, es él”, manifestó.

La declaración disgustó a los clientes de Cabrera que al final de la diligencia rodearon a la profesional para reclamarle y decirle que está “comprada”. Querían que se no se trataba del cuerpo del ex notario.

Algunos de los asistentes comentaron que está en Suiza disfrutando del dinero que le confiaron miles de personas.

Dos policías la protegieron y logró salir, mientras las personas la insultaban.

El fiscal Macas refirió que también se tomaron las huellas dactilares y muestras de diversos órganos: ojos, hígado, riñón; y líquidos para hacer un examen de ADN y compararlo con una muestra similar de un pariente cercano del ex notario.

“No queda nadie de la familia, todos han huido, cómo va a comparar”, se quejó un hombre que no quiso identificarse, pero dijo que era cliente. “Veremos lo que contempla la ley”, respondió Macas.

El abogado patrocinador de los demandantes indicó que él no estaba tranquilo con ver el cuerpo, como no lo están –aseguró– las personas que lo conocieron. Indicó que solo valdrán los resultados de los exámenes.

Resultados
Los médicos Aníbal Pineda, José Santacruz, Édison Sánchez y Woldey Polo actuaron como peritos en esta diligencia de la Fiscalía.

 Sobre un reclamo de los que entregaron dinero, de que hay la posibilidad de que los profesionales hayan sido conocidos de Cabrera y por ello podrían presentar un informe parcializado, el fiscal les aclaró que si tienen dudas deben delegar un médico en el que confíen. “Nunca me pidieron”, aseguró.

El fiscal no definió la fecha en la que los peritos tienen que presentar los resultados de la exhumación. Estos análisis definirán técnica y científicamente si se trata de José Cabrera Román.

Clientes

RESPALDO
En la mañana del 14 de noviembre pasado los ex clientes de José Cabrera decían que en ningún momento habían desconfiado de los hijos del ex notario José y Carolina Cabrera Gallardo, que días después de la muerte de este tomaron a cargo el negocio.

ACUSACIONES
Sin embargo a las 10h00 de ese día, cuando Carolina anunció desde Estados Unidos que no tenían dinero para devolver a los ex clientes de su padre, porque los militares se lo habían llevado; las personas que antes los respaldaban se volvieron en contra de ellos y exigieron que las autoridades los traigan al país.

DUDAS
A las 18h30, decenas de personas se dirigieron al cementerio Parque de la Paz, de Machala, abrieron la tumba del ex notario y con una lampa levantaron la tapa del ataúd y pese a la poca luz que había en el cementerio, algunos aseguraron que el cuerpo que estaba en el cofre no era Cabrera, que era un muñeco hecho en Quito, donde´el ex notario falleció.