Desde ayer, el Municipio de Santa Elena administra el complejo Baños termales de San Vicente. Así lo anunció el alcalde Dionisio Gonzabay luego de la reunión de Concejo Cantonal en que se determinó revocar el contrato de concesión a la empresa Megafirst.

“La medida obedece a que esa entidad no estaba constituida como tal cuando se le otorgó la concesión. Eso la invalida”, reconoció Gonzabay, quien adujo un “error que se le pasó al procurador síndico del Municipio, Eduardo Vergara”.

Megafirst obtuvo un contrato de concesión del cabildo de Santa Elena el pasado 30 de septiembre, pero su registro en la Superintendencia de Compañías se realizó el 11 de octubre.

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Ese fue el argumento que llevó a un grupo de moradores a cuestionar el contrato que duraría cinco años. A la protesta se sumó la Asamblea Santaelenense, que interpuso una queja en la Defensoría del Pueblo el pasado 17 de noviembre.

Ahora, bajo gestión directa municipal, Gonzabay dispuso que Arturo Mazón Ordóñez sea el administrador del complejo ubicado en el km 119 de la vía a la costa.

“Mazón tiene el perfil adecuado. Su contrato durará seis meses”, manifestó sobre el nuevo funcionario, quien –según reveló– ejerció la administración del hotel Colón Miramar ubicado en Salinas.

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Gonzabay manifestó que cuenta con un proyecto para dotar de agua a San Vicente que cuesta $ 500 mil. “Para ello se buscará financiamiento con el Miduvi y el Fondo de Solidaridad”, afirmó.