Abogado de Pinochet renuncia a defenderlo ante la Corte

El abogado de Augusto Pinochet, Pablo Rodríguez, renunció este viernes a defenderlo ante la Corte de Apelaciones de Santiago, alegando una irregularidad en ese tribunal que debe fallar sobre un recurso de amparo que podría liberar al ex dictador chileno de su arresto por los crímenes de la "Operación Colombo".

Rodríguez cuestionó al abogado Nelson Pozo, uno de los integrantes de la Sexta Sala de la Corte (encargada de examinar el amparo) junto con los jueces Haroldo Brito y Lamberto Cisternas.

"Se ha manipulado la composición de esta Sala", insistió Rodríguez, jefe del equipo jurídico que defiende a Pinochet, al anunciar que llevará el caso hasta la Corte Suprema, que en definitiva tendría que pronunciarse sobre el amparo.

"Si nosotros recusamos a un abogado integrante, lo hicimos porque ellos en gran medida dependen del Gobierno", dijo Rodríguez, al objetar la presencia de Pozo en la sala de la Corte.

Rodríguez se retiró visiblemente molesto del edificio de las Cortes, donde la audiencia del tribunal de apelaciones se inició con dos horas de retraso, cerca del mediodía.

El presidente de la Corte de Apelaciones, Juan Escobar, rechazó en forma categórica que hubiera manipulación, como denunció el abogado de Pinochet, y reafirmó la independencia con que actúan los jueces.

"Nadie se va a prestar ni menos el presidente de la Corte de Apelaciones para que se manipule la sala, en lo absoluto. Lo desmiento categóricamente", dijo Escobar, que también se mostró molesto por el incidente.

"Cualquiera que sea la composición de las salas, las partes litigantes tienen que confiar en las salas", agregó el magistrado.

Si el tribunal acoge el recurso, el general Pinochet quedará libre del proceso por la "Operación Colombo" que dejó 119 desaparecidos a mediados de 1975, en un plan represivo que ejecutaron agentes de la policía secreta de la dictadura (1973-1990).

Pinochet permanece bajo arresto domiciliario desde el pasado 23 de noviembre, por su responsabilidad en esas desapariciones y un juicio paralelo por fraude tributario y otros delitos vinculados con las cuentas secretas que mantuvo en bancos de Estados Unidos y otros países.

Pinochet, que el viernes pasado cumplió 90 años, fue inculpado en los crímenes de la "Operación Colombo" por el juez Víctor Montiglio, después de someterlo a un careo o interrogatorio conjunto con el general retirado Manuel Contreras, fundador de la DINA (Dirección de Inteligencia Nacional), la policía secreta acusada de la mayoría de los 3.000 muertos y desaparecidos que dejó el régimen militar.

Montiglio actúa con el respaldo de la Corte Suprema, que el pasado 14 de septiembre privó de su fuero al ex dictador para que entregue los antecedentes de esa operación que ejecutaron los agentes de la DINA.

Versiones oficiales que difundió la prensa controlada por los militares, en julio de 1975, informaron que los cadáveres de 119 miembros del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) y otras organizaciones clandestinas habían aparecido en Argentina y Brasil, como consecuencia de disputas internas.